León XIV deroga un documento del Papa Francisco y abre la mano con las inversiones de la Santa Sede
Las nuevas disposiciones de León XIV, con las que deroga un documento del Papa Francisco, permiten recurrir a «intermediarios financieros establecidos en otros Estados»
El Papa León XIV ha aprobado este lunes 6 de octubre un motu proprio con el que modifica el procedimiento a seguir a la hora de realizar las inversiones financieras de la Santa Sede. Concretamente, le quita al llamado Banco Vaticano, técnicamente denominado Instituto para las Obras de Religión (IOR), la exclusividad en esta materia. A partir de ahora, se podrá recurrir a «intermediarios financieros establecidos en otros Estados», si así lo considera «más eficiente o conveniente» los órganos eclesiales competentes, se lee en el documento aprobado por el Pontífice.
El movimiento cambia las reglas de juego que había marcado Francisco en agosto de 2022, cuando determinó que el IOR era el único organismo competente para la gestión de activos y la custodia de todos los bienes muebles de la Santa Sede. Incluso obligaba a que todas la instituciones de la Curia romana que poseyeran activos financieros y liquidez en instituciones financieras distintas del Banco Vaticano informaran a este y le transfirieran los fondo lo antes posible.
Ahora, todas estas medidas han quedado derogadas por León XIV. Sin embargo, el IOR será el medio habitual para canalizar este trabajo. «Al determinar las actividades de inversión financiera de la Santa Sede, la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica generalmente hace uso efectivo de la estructura organizativa interna del Instituto para las Obras de Religión», escribe el Papa americano.

Comité de inversiones y Becciu
Con el documento, fechado el 29 de septiembre pero dado a conocer este lunes 6 de octubre, el Santo Padre subraya el trabajo del Comité de Inversiones. Todas las actividades de inversión de financiera «que se destinen a su propio uso y se realicen de conformidad con el art. 219 de la Constitución Apostólica Praedicate Evangelium —establece el Pontífice—, deben cumplir las disposiciones establecidas por el Comité de Inversiones, de conformidad con la política de inversiones aprobada».
El movimiento ha coincidido en el tiempo con la apelación del famoso caso Becciu, en el que se juzga al exnúmero dos de la Secretaria de Estado. Angelo Becciu fue condenado a cinco años y medio de cárcel por malversación de fondos, pero absuelto de un buen número de otras causas en las que se le imputaba una serie de irregularidades financieras.
Este largo proceso surgió de la compra de un edificio en Londres por la Secretaría de Estado vaticana cuando el entonces cardenal Becciu era su número dos (2011-2018). La operación creó un agujero de 139 millones de euros en las cuentas de la Santa Sede.

Consejo para la Economía
Por otro lado, el motu proprio aprobado por León XIV también llama a definir «claramente los roles y las responsabilidades de cada institución, haciendo posible que todos converjan en una dinámica de colaboración mutua», de acuerdo con el principio de «responsabilidad compartida» establecido por la Constitución Apostólica Praedicate Evangelium del Papa Francisco.
Como ejemplo de esta colaboración, el Pontífice ha establecido todas estas directrices tras evaluar «atentamente las recomendaciones aprobadas unánimemente por el Consejo de Economía y habiendo consultado a personas expertas en la materia».