La Iglesia en España despide a Benedicto XVI: «Ha dejado una huella imborrable»
La Conferencia Episcopal Española destaca su cercanía con nuestro país, que se puso de manifiesto en tres viajes a Valencia, Santiago y Barcelona y Madrid
La Iglesia española ha reaccionado a la pérdida de Benedicto XVI de forma inmediata. Y la más inmediata en estos tiempos suelen ser las redes sociales. El Vaticano anunció el fallecimiento del Papa emérito a las 10:32 horas de este sábado por la mañana, apenas una hora después de que Joseph Ratzinger se apagara en serenidad en su habitación del monasterio Mater Ecclesiae dentro de los muros vaticanos.
El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha publicado un mensaje en Twitter en el que da las gracias al Señor «por haber puesto al frente de la Iglesia como sucesor de Pedro». «Tuvo pasión por la verdad, claridad en la transmisión de la fe y un profundo amor a la Iglesia. La archidiócesis de Madrid, que él visitó, reza por su eterno descanso. D. E. P.», concluye. Benedicto XVI viajó en 2011 a Madrid, su último viaje a España.
Por su parte, el cardenal Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), ha solicitado en un videomensaje oraciones por el eterno descanso de Benedicto XVI y le ha dedicado unas cariñosas palabras: «Agradecemos su profundo ministerio como Papa, sus escritos teológicos y su profundo amor a la Iglesia. Que desde la casa del Padre siga mirando con ternura nuestro mundo y a cada uno de nosotros. Que ruegue al Padre para que la paz y la concordia reine entre nosotros, para que no nos desviemos del camino que conduce al encuentro con el Dios hecho hombre en ese niño de belén cuyo misterio estamos celebrando en estas entrañables fiestas de Navidad. Quedará para siempre en nuestro corazón su cercanía con la Iglesia que peregrina en España».
Tres viajes a España
Ha recordado también que Benedicto XVI viajó tres veces a España. En 2005 a Valencia, en 2010 a Santiago y Barcelona y, en 2011, a Madrid: «En aquella ocasión, tras la tormenta de Cuatro Vientos nos dijo a todos que habíamos vivido una aventura juntos y nos animó a afrontar con Cristo las pruebas de la vida».
«Querido Benedicto XVI le recordaremos siempre. Que Santa María madre de Dios y madre nuestra le muestre a Jesús fruto bendito de su vientre. Papa Benedicto, descanse en paz», ha terminado el cardenal arzobispo de Barcelona.
Por su parte, el secretario general de la CEE, César García Magán, se ha unido a las oraciones por su eterno descanso y ha destacado sus viajes a España y la importancia de su magisterio, no solo sus encíclicas, sino también homilías y discursos.
En este sentido, ha añadido que tenía «el carisma de los sabios» y que «siendo cumbre de la Teología, sabía transmitir con cercanía y profundidad». «Ha dejado una huella imborrable en la Iglesia y ya forma parte de esa lista de grandes Papas del siglo XX y XXI. Fu una dignísima sucesión al largo pontificado de Juan Pablo II y un adviento de nuestro Papa Francisco», ha concluido.
A estas reacciones se han sumado la práctica totalidad de los obispos españoles. Como el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, quien ha afirmado que la vida y el magisterio de Benedicto XVI han sido «luminosos y fecundos». El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, ha destacado su profunda espiritualidad y fidelidad, y ha recordado que él fue quien lo nombró obispo de Coria-Cáceres. El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, lo ha definido como «cooperador de la verdad».