Fallece José Luis Caravias, el misionero al que el Papa salvó la vida - Alfa y Omega

Fallece José Luis Caravias, el misionero al que el Papa salvó la vida

Bergoglio le advirtió de que era uno de los objetivos de la Alianza Anticomunista Argentina y le sugirió que se fuera a España. Posteriormente, le escribió en código para que no volviera al país

Redacción
José Luis Caravias

El pasado 25 de marzo falleció en Asunción (Paraguay) el jesuita español José Luis Caravias Aguilar, nacido en Alcalá la Real, Jaén, en 1935, y que fue salvado de una muerte segura en los años 70 por el entonces provincial de los Jesuitas Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco.

Ambos se conocieron en Argentina, país al que llegó Caravias después de ser expulsado de Paraguay en 1972 por el dictador Stroessner. Primero recaló en las parroquias rurales en el Chaco Argentino, después en la archidiócesis de Cuenca de Ecuador y luego, de nuevo, en Argentina, en concreto en Buenos Aires, a donde llegó en 1974.

En la capital bonarense trabajó con los paraguayos expatriados gracias a su conocimiento del guaraní, según ha contado el servicio misionero de noticias OMPress. Pero tuvo que volver a cambiarse de país cuando el padre Carlos Múgica fue asesinado por su postura crítica contra la organización guerrillera de los montoneros. Tras el crimen, el entonces provincial jesuita, Jorge Mario Bergoglio le informó de que figuraba en el objetivo de la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina) junto a otros dos jesuitas, Francisco Jalics y Orlando Yorio, y le sugirió que volviera a España.

José Luis Caravias Aguilar siguió el consejo del Papa y siempre estuvo seguro de que, de no haberlo hecho, habría sido asesinado. Asimismo, sostenía que sin la intervención de Bergoglio los otros dos sacerdotes se habrían convertido, como tantos otros, en desaparecidos.

Unos días después de llegar a España, el padre Bergoglio le mandó un telegrama insistiéndole en que no regresara a Argentina. El actual Papa le volvió a escribir pasado un año, pero lo hizo con una carta en código en la que le advertía que, si regresaba a Buenos Aires, podría sufrir un riesgo de «contagio grave de salud».

Vuelta definitiva a Paraguay

Con la caída del régimen de Stroessner en 1989, José Luis pudo volver a Asunción, ciudad que pisó por primera vez en 1961 y donde trabajó hasta su expulsión con los campesinos en las Ligas Agrarias Cristianas. En aquella época publicó su primer libro Vivir como Hermanos.

En su segunda etapa en el país, desarrolló una intensa actividad pastoral en la dirección del Colegio Técnico Javier; también dirigió el programa Fe y Justicia en Radio Fe y Alegría; pasó por el Centro de Estudios Paraguayos Antonio Guash; por el Escolasticado jesuita de San Cayetano; e impartió numerosos cursos a parejas y matrimonios.

Pésame de los obispos

La Conferencia Episcopal Paraguaya ha hecho pública una carta de pésame por el fallecimiento de esta figura tan importante de la Iglesia en Paraguay durante el último medio siglo.

Los obispos han expresado sus condolencias y su cercanía espiritual a la Compañía de Jesús y a los familiares del misionero, al que han calificado como «un activo participe en el quehacer social y pastoral de la Iglesia en el Paraguay».