Italia impide a los menores acceder a contenidos inapropiados
Numerosos padres y asociaciones habían reclamado esta medida por la facilidad con la que los adolescentes pueden acceder a contenido para adultos
Desde este martes, los teléfonos móviles de los menores de edad en Italia ya no podrán tener acceso a contenidos inapropiados para sus usuarios. Esta es la iniciativa que ha llevado a cabo el Ministerio de Comunicaciones del país transalpino ante las numerosas reclamaciones de padres y asociaciones por la facilidad con la que los adolescentes puedan acceder a páginas de contenido para adultos.
Concretamente, la medida supone el bloqueo de las tarjetas SIM de los teléfonos de los menores de edad para que no puedan acceder a varios tipos de contenidos: pornografía, violencia, mensajes de odio y discriminación, propaganda de sectas, armas, apuestas online, páginas que promuevan los trastornos alimentarios e incluso herramientas para tener acceso ilimitado a internet sorteando mecanismos de rastreo.
«Son buenas noticias, se está avanzando por el buen camino», reconoce a Alfa y Omega Jorge Gutiérrez Berlinches, impulsor de la ONG Dale Una Vuelta, dedicada a la información y prevención de los riesgos de la pornografía. La de Italia es una medida «necesaria y urgente», que pone el acento «en un tema prioritario como es el de la protección de los menores en el mundo digital, que no solo se reduce al acceso a la pornografía».
De hecho, Gutiérrez Berlinches espera que el nuevo Ministerio de Infancia y Juventud que se ha creado en España «tenga como una de sus prioridades la protección real y efectiva de los menores en este ámbito». El director de Dale Una Vuelta añade que «es el momento de hacer algo y ponerse manos a la obra». En este sentido valora positivamente el sistema de verificación de edad que la Agencia Española de Protección de Datos va a presentar el próximo 14 de diciembre.
«Poco a poco se irán plasmando medidas también en la legislación española», augura Gutiérrez Berlinches. Para él, «tanto los padres como todos los miembros de la comunidad educativa lo están solicitando de alguna manera, no solo ante el aumento de la pornografía sino también en cuanto a la creciente adicción a los móviles».