Gentes: Isidro Catela, director de la Oficina de Información de la CEE (en Archisevilla Digital) - Alfa y Omega

La tradicional mala prensa de la Iglesia no es una novedad, ha sucedido siempre. Ya nos lo avisó nuestro Señor. No podemos pretender que el anuncio del Evangelio, que sea buena noticia, vaya a ser aplaudido por todos y nos vayan a dar palmaditas. Lo vamos a pasar mal, la cruz está ahí, y en comunicación también vamos a tener cruces. Hay mucho interés ideológico en mimetizar los comportamientos de la Iglesia con los políticos, sociales y de otras instituciones. En ese sentido, una de las estrategias más habituales para molestar o hacer daño a la Iglesia es jugar a la división interna, mantener que hay varias Iglesias. Pensemos también que la Iglesia defiende de manera invariable una serie de valores innegociables, y que no invierte mucho dinero en los medios de comunicación.