Gentes: Eduardo Hertfelder, presidente del Instituto de Política Familiar (en La Razón) - Alfa y Omega

España se queda sin niños y la baja natalidad en la que está sumida es un preocupante y alarmante grito de alerta de que algo no funciona correctamente. Un país sin hijos es, sin duda, un país sin futuro. Pero España, además, es, cada vez más, una sociedad con menos matrimonios y más rupturas familiares. Nos estamos convirtiendo en una sociedad desestructurada, de individuos sin interrelación, una sociedad deshilachada. Sin embargo, de todas las instituciones humanas, la familia es la que ha soportado más calamidades y ha sobrevivido a más crisis. Una sociedad no puede evolucionar sin su célula principal: la familia.