Gentes: Ángel Sánchez Toledano, bloguero (en Siete en familia)
Jesús nos explicó que su reino es semejante a un banquete de bodas. Todos hemos sido invitados a participar de esa gran fiesta, y el Evangelio insiste en algo externo pero indispensable para presentarse: el vestido para la celebración. Para entrar con la prenda apropiada hay que elegir la que lleva colgada la etiqueta: Vida de gracia, que además es totalmente gratuita . Una vez puesta, hay que mantenerla limpia hasta la entrada al convite. ¿Está sucia tu ropa? No te preocupes, se lava con Confesión. La deja impecable.
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