Francisco invita a los kazajos a «no eliminar de la memoria la oscuridad»

Francisco invita a los católicos kazajos a «no eliminar de la memoria las oscuridades»

Olvidar las experiencias dolorosas puede llevar a «creer que son agua pasada», cuando la realidad es que la paz «nunca se consigue de una vez por todas»

Redacción
Misa del Papa en Kazajistán
Un momento de la celebración en la explanada de la Expo, en Nursultán. Foto: CNS.

El Papa ha advertido de que la paz «nunca se consigue de una vez por todas» y ha aconsejado «no eliminar de la memoria ciertas oscuridades», en la Misa que ha celebrado por la tarde en Nursultán. Tras participar por la mañana en el Congreso de Líderes de las Religiones Mundiales y Tradicionales, ha dedicado al tarde a la comunidad católica del país, menos del 1 % de la población. Ha sido el principal encuentro con ellos durante su breve viaje, de menos de 48 horas.

Ante cerca de 7.000 personas congregadas en la explanada de la Expo en Nursultán, ha recordado que «en la historia de esta tierra no han faltado mordeduras dolorosas», recoge EFE. Aludía a las lecturas de este miércoles, en el que la Iglesia celebra la Exaltación de la Santa Cruz. «Pienso en las serpientes abrasadoras de la violencia, de la persecución atea, en un camino a veces tortuoso durante el cual la libertad del pueblo fue amenazada, y su dignidad herida».

En Kazajistán, como también recordó el martes ante las autoridades, se instalaron enormes campos de trabajo para los prisioneros políticos y deportados. Por eso, san Juan Pablo II definió el país como «la prisión de la Unión Soviética».

Mirar desde la cruz

El Santo Padre ha subrayado que «no hay que eliminar de la memoria ciertas oscuridades, pues de otro modo se puede creer que son agua pasada y que el camino del bien está encauzado para siempre». Al contrario, «la paz nunca se consigue de una vez por todas. Se conquista cada día, del mismo modo que la convivencia entre las etnias y las tradiciones religiosas, el desarrollo integral y la justicia social».

En vez de olvidar, el Pontífice ha afirmado que «nos hace bien custodiar el recuerdo de todo lo que se ha sufrido». Pero mirándolos desde la cruz de Cristo, porque desde ella «aprendemos el amor, no el odio; aprendemos la compasión, no la indiferencia; aprendemos el perdón, no la venganza».

El camino de la cruz, ha añadido, no es «el de la imposición y la coacción, el del poder o el de la relevancia». «Nunca el camino que empuña la cruz de Cristo contra los demás hermanos y hermanas por quienes Él ha dado la vida», ha insistido según Europa Press.

«El camino de Jesús, el camino de la salvación, es otro: es el camino del amor humilde, gratuito y universal, sin condiciones y sin «peros»». Por ello, ha instado a «no murmurar, no acusar, no chismorrear, no difundir maldades, no contaminar el mundo con el pecado y con la desconfianza que vienen del maligno».

Después de recorrer la explanada desde el papamóvil, Francisco ha recibido ayuda para celebrar la Misa. Debido a sus problemas de rodilla, ha permaneció sentado durante la Misa y solo ha leído la homilía. El jueves se reunirá con el clero del país en la parroquia del Nuestra Señora del Perpetuo Socorro y asistirá a la conclusión del Congreso de Líderes de las Religiones Mundiales y Tradicionales.

Visados para los eclesiásticos
Firma acuerdo

En el contexto de la visita del Papa Francisco, la Santa Sede y la República de Kazajistán han firmado este miércoles un acuerdo para facilitar la concesión de visados y permisos de residencia a los religiosos y representantes eclesiales extranjeros que se dediquen a la atención pastoral de los fieles católicos.

Se trata de un Entendimiento para implementar el artículo 2 del acuerdo bilateral de 1998, y lo han firmado el secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales del Vaticano, Paul Richard Gallagher, y el viceprimer ministro y ministro de Asuntos Exteriores kazajo, Mukhtar Tileuberdi. Según la Oficina de Prensa de la Santa Sede, «el acuerdo consolida aún más los lazos de amistad y colaboración que ya existen entre las dos partes». Entrará en vigor después de que se intercambien los instrumentos de ratificación.