Estos hornos centenarios vuelven a funcionar tras la DANA gracias a Renacer Panadero
El proyecto está impulsado por CESAL, Fundación MAPFRE y el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia. «No podíamos permitir que este patrimonio desapareciera»
Seis hornos artesanos de la Comunidad Valenciana, algunos con más de 250 años de historia, han vuelto a abrir sus puertas tras los devastadores efectos de la DANA de octubre de 2024. «No podíamos permitir que este patrimonio desapareciera, por eso, hemos trabajado codo con codo con Cesal y la Fundación MAPFRE para devolverles la esperanza y ayudarles a reemprender su actividad», declara a través de un comunicado Laura de Juan, secretaria general del Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia que, junto a las otras entidades, ha puesto en marcha esta iniciativa llamada Renacer Panadero.
Según de Juan, el proyecto «ha dado una nueva oportunidad a muchas personas que encuentran en la panadería un futuro profesional». Sus establecimientos se encuentran en Albal, Benetússer, Catarroja, Picanya, Torrent y Castellar-L’Oliveral (a las afueras de Valencia capital). Aparte, un séptimo sigue en proceso de reconstrucción tras el catastrófico temporal del que ya han pasado más de seis meses.
Según explica Pablo Llano, director general de Cesal, su proyecto junto al Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia surgió tras identificar dos necesidades. Por un lado, proporcionar «un relevo generacional para los hornos de panadería», pero también dar «un oficio para numerosas personas en riesgo de exclusión». Por tanto, al conocer en profundidad los daños que sufrió el sector, «nos pusimos en marcha para recuperar sus negocios, que ofrecen un servicio fundamental a la sociedad»
Fundación MAPFRE también ha respaldado el proceso. Su directora general, Elvira Vega, considera clave esta colaboración con CESAL y el Gremio de Panaderos porque favorece «la inserción social y laboral de colectivos de jóvenes en situación de vulnerabilidad».
En paralelo, Cesal ha lanzado una serie audiovisual que documenta las historias de tres de estas panaderías, todas con varias generaciones dedicadas al oficio. «Queremos dar voz a los protagonistas para que sean quienes trasladen el recorrido que están llevando a cabo», añade Llano, quien insiste en que «queda mucho por delante y no podemos dejar a nadie atrás».