«Estamos perdiendo la capacidad de conmovernos y experimentar la compasión»

El Papa Francisco ha presidido este viernes una Misa en el hospital Gemelli de Roma con motivo del 60 aniversario de la creación de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Sacro Cuore, que tiene su sede en este centro médico. Ocasión que ha aprovechado para agradecer de nuevo la atención que recibió el pasado mes de julio cuando estuvo ingresado por una estenosis diverticular grave: «Quiero renovar mi agradecimiento por los cuidados y el cariño que he recibido aquí».

En la explanada frente al hospital, con alumnos, enfermos y personal sanitario presentes, Francisco ha pedido en la homilía que, sobre todo en periodos de sufrimiento, «hagamos memoria para no olvidar, para no entristecernos y para que esta nos oriente en nuestras decisiones», informa EFE.

En este sentido, ha lamentado que con «las prisas de hoy, entre miles de carreras y afanes» se pierda la capacidad de recuerdo, la memoria». «Estamos perdiendo la capacidad de conmovernos y experimentar la compasión», ha agregado.

En su opinión, «sin memoria se pierden las raíces, y sin raíces no se crece» y, por eso, ha invitado a «alimentar la memoria de quien nos ha amado, sanado y aliviado». A los médicos, en concreto, ha animado a poner en práctica tres palabras en su profesión: recuerdo, pasión y consuelo.

Caricias que dan sentido

De este modo, ha reivindicado la importancia de «una palabra fraterna, una sonrisa, una caricia en la cara» en el día a día de los hospitales, porque pueden «dar sentido» a la jornada de un enfermo.

También ha puesto de manifiesto que la pandemia ha hecho que nos veamos «más pequeños y frágiles» a pesar de tantos avances. Límites que también se han podido experimentar en el campo médico: «Cuántas enfermedades raras y desconocidas, cuánto esfuerzo para mantenerse al día con las patologías».