«Esta Navidad me pido ver a mi familia»
Jonas, de 13 años, y Jonathan, de 17, son dos de los chicos filipinos que van a recibir las cartas de niños españoles durante nuestra campaña de Navidad. «En el centro donde vivo me dieron una familia», cuenta el primero
«El Niño Jesús vino para salvarnos y ayudarnos a cambiar. Él es muy importante para mí. Pero me gustaría preguntarle por qué se hizo como nosotros». Esta explicación sobre la Navidad nos la envía Jonas, unos de los niños filipinos que van a recibir vuestras felicitaciones de Navidad durante la campaña que el Pequealfa organiza con el programa La hora feliz, de Radio María. Este chico tiene 13 años, y vive en uno de los centros de la fundación ANAK-TnK. Por eso, su mayor deseo para estas fiestas es «ver a mi familia».
«Mi vida en la calle era muy dura»
Jonas llegó al centro hace seis años, cuando tenía solo 7. Antes vivía en la calle, pero prefiere no contarnos por qué dejó de estar con su padre y su madre. Solo nos dice que «en la calle, mi vida era muy dura. No tenía ningún amigo, conocí a gente mala y tuve malas experiencias».
Entonces encontró a los educadores de la fundación, que recorren las calles ayudando a los niños, curándoles sus heridas y enfermedades y enseñándoles. Pero, sobre todo, se hacen amigos suyos para que acepten ir a alguno de los hogares de ANAK. Allí están seguros, tienen comida y ropa y van al colegio. Pero lo más importante para Jonas es que «me dieron una familia. En el centro tengo muchos amigos. Lo que más me gusta es jugar al vóleibol en la pista que hay en el tejado. Además, me enseñan a ser una buena persona. Me gustaría ser profesor… ¡y cantante!». No es lo único que aprende en el centro: el padre Matthieu, director de la fundación, les habla siempre de Jesús y les dice que pueden llegar a ser santos.
Mejor con sus padres
Sin embargo, aunque en estos centros los niños estén tan bien, el sacerdote y los trabajadores saben que lo mejor para los niños es volver con sus padres. Por eso, cuando uno llega a la fundación, intentan encontrarlos y ayudarlos a cambiar para que se puedan hacer cargo de los pequeños. Por eso, Jonas tiene la esperanza de poder ver a su familia dentro de poco.
Algunos chicos de ANAK tienen la suerte de visitar estos días a sus padres, si ya están mejor. Uno de ellos es Jonathan, de 17 años. «Es mi parte favorita de la Navidad», nos dice. También él, como Jonas, llegó al centro de ANAK con 7 años, después de haber vivido una temporada solo. «Antes –nos cuenta–, en mi familia no me atendían ni me daban cariño. Hubo una pelea, y yo terminé en la calle».
En el hogar de la fundación «he encontrado apoyo para vivir bien y tener un futuro. Aquí puedo ir al colegio, estudiar y aprender. Me gustaría ser cocinero o policía. Entre las cosas que más me gustan, están las actividades como los campamentos de verano y la gran fiesta que se organiza en el aniversario de la fundación. Soy muy feliz, me encanta estar aquí».
Jonathan es un poco como un hermano mayor para los demás chicos de su centro. Por eso, a veces se enfada cuando «los más pequeños no nos hacen caso». Pero, como en el fondo todos se quieren, «mi deseo de Navidad es que todos ellos puedan estar con sus padres. Y al Niño Jesús quiero darle las gracias por darme la vida y por poder disfrutarla».
Si quieres participar en nuestra campaña pero todavía no lo has hecho, ¡no pierdas ni un minuto! Solo podremos enviar las cartas que recibamos hasta el 20 de diciembre. Tienes que enviarnos tu tarjeta o carta, escrita en inglés, indicando tu nombre, apellidos y edad, a:
Pequealfa, c/ Pasa 3, 28005 – Madrid.
O, si prefieres por correo electrónico, a pequealfa@alfayomega.es