Francisco quiere «déficit cero» en las cuentas vaticanas - Alfa y Omega

Francisco quiere «déficit cero» en las cuentas vaticanas

Invita a oficinas y dicasterios a ser como «las buenas familias» y que las ramas con superávit ayuden a cubrir las pérdidas de otras. A todas les pide «eliminar lo superfluo»

Rodrigo Moreno Quicios
La plaza de San Pedro durante el rezo del ángelus del 15 de septiembre
La plaza de San Pedro durante el rezo del ángelus del 15 de septiembre. Foto: CNS / Vatican Media.

El Papa ha enviado una carta dirigida al Colegio Cardenalicio en la que subraya la importancia de lograr un «déficit cero» en la gestión económica de la Santa Sede. Su texto, hecho público este viernes, califica esta aspiración no solo como un objetivo teórico, también como una meta «alcanzable». En su misiva, el Santo Padre llama a los purpurados a implementar una administración más eficiente y responsable con sus recursos. Y pide a los diferentes dicasterios y oficinas vaticanas encontrar «recursos externos» para sus diferentes tareas y así fomentar una «gestión transparente y responsable al servicio de la Iglesia».

Este documento, fechado el 16 de septiembre aunque se ha difundido al público este viernes 20, refleja el deseo de Francisco de profundizar en la reforma económica como paso siguiente a la reorganización de la Curia mediante la constitución apostólica Praedicate Evangelium. Agradece además «la dedicación y el esfuerzo» de quienes han trabajado en este proceso de renovación. Y celebra que, a pesar de «las dificultades y la tentación de inmovilidad», se han obtenido avances significativos.

También se han iniciado ya cambios en lo económico. Es algo que ya reconocía el año pasado entrevistado por este semanario Juan Antonio Guerrero, exprefecto de la Secretaría para la Economía de la Santa Sede. «Se han establecido muchos más controles, las operaciones son más visibles, hay una matriz de autorizaciones para las operaciones y es mucho más claro quién hace qué», dijo entonces. Algo que, a su juicio, ha servido para «restablecer la credibilidad perdida por los errores pasados y crear las condiciones para que no se produzcan más».

Imitar a «las buenas familias»

En su carta a los cardenales, el Papa Francisco hace especial hincapié en la necesidad de manejar los recursos económicos con «rigor y seriedad». Y pone como ejemplo a las «buenas familias». Esto implica que las organizaciones que registren un superávit deberán contribuir a cubrir el déficit general preocupándose «por el bien de nuestra comunidad y actuando con generosidad». Para Francisco, es fundamental que cada institución evite «lo superfluo» y seleccione bien sus prioridades para colaborar estrechamente con los demás y fomentar sinergias.

Finalmente, el Santo Padre concluye su misiva llamando a tomar decisiones estratégicas con «gran responsabilidad» para asegurar en el futuro la misión de la Iglesia. E invita a los purpurados a implementar sus recomendaciones «con coraje y espíritu de servicio».