El muelle de Arguineguín se vacía de migrantes - Alfa y Omega

El muelle de Arguineguín se vacía de migrantes

Las 27 últimas personas que abandonaron el campamento, denuncia CEAR, tenían la COVID-19 y dormían en el suelo

Redacción
Desalojo del muelle de Arguineguín, en Gran Canaria. Foto: Efe

El campamento de primera acogida para los inmigrantes que llegan en patera del muelle de Arguineguín, en el sur de Gran Canaria, ha quedado vacío este domingo, tres meses y nueve días después de haberse instalado, informa Efe.

Con la salida de los últimos hombres que quedaban en el muelle, el Ministerio de Interior da cumplimiento al requerimiento que le hizo el viernes pasado el Defensor del Pueblo, que le instó a desmantelar «de inmediato» ese campamento en el que llegaron a hacinarse hace semanas unas 2.600 personas.

«Lo celebro, pero queda mucho por hacer», ha dicho a través de Twitter el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, que ha pedido varias veces que se cierre ese campamento, porque consideraba que su situación y sus condiciones eran «insostenibles».

«No lo olviden: a nadie le gusta dejar atrás a la familia. Como aquellos canarios y canarias, nuestros antepasados, que se vieron obligados a dejarlo todo y a buscar otras orillas. Lo llevamos en el ADN. En Canarias no cabe la xenofobia», ha añadido.

En principio, la intención de la Delegación del Gobierno es desmantelar el campamento a partir de este lunes , ya que su función de proporcionar un lugar para las primeras 72 horas de retención y filiación la desempeñará ahora otro campamento, el de Barranco Seco, en las afueras de Las Palmas de Gran Canaria.

No obstante, permanecerán en el muelle de Arguineguín algunas carpas que serán utilizadas como lugar de primera asistencia y cribado sanitario para quienes desembarquen de los buques de rescate a partir de ahora.

Con la COVID-19 y durmiendo en el suelo

Por su parte, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha pedido este lunes que no se vuelva a repetir el modelo de campamento «calabozo» creado en Arguineguín. «Es sintomático que las últimas 27 personas que abandonaron anoche este lugar eran personas con la COVID-19 que dormían en el suelo. Eso era el muelle de Arguineguín», ha señalado el portavoz de CEAR en Canarias, Txema Santana, en el exterior del muelle, mientras los servicios de limpieza desinfectaban el campamento ya vacío.

CEAR ha subrayado que las organizaciones que venían denunciando hace tiempo las condiciones que soportaban los inmigrantes en el interior de ese campamento, a veces durante semanas, no se toman su desmantelamiento «como una victoria», porque la realidad es que el paso que se dio este domingo al vaciarlo «era indispensable desde el mismo día en que se montó», hace tres meses y 10 días.

«Arguineguín fue una improvisación y ha hecho las veces de calabozo. En este muelle va a quedar el lamento de las madres que veían como las separaban de sus hijos, los muchos migrantes que no tenían asistencia letrada, las miles de personas que fueron hacinadas, los muchos que durmieron a la intemperie», ha señalado.

CEAR exige que este modelo no se repita, que el sistema de acogida humanitaria «fluya» y que el Centro de Acogida Temporal de Extranjeros (CATE) de Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria, funcione de tal manera que nadie vuelta a estar allí detenido más allá de las 72 horas que fija como límite la legislación.

Pero, además, advierte de que el Plan Canarias que el Gobierno central ha anunciado para crear en las islas más campamentos con 7.000 plazas que sustituyan a los complejos turísticos utilizados hasta ahora para albergar a quienes llegaban en las pateras «va a fracasar» si no hay solidaridad del resto de España con el archipiélago en el reparto de estas personas.

«Hacemos un llamamiento al Estado y a la UE a comprender que las islas europeas no pueden ser solo territorios de recepción, donde se creen miles de plazas de acogida. Este plan ha fracasado en otros territorios. El Plan Canarias va a fracasar, lo podemos decir ya, si no se acompañan las medidas presentadas con traslados ágiles, periódicos y transparentes a territorio continental. Está abocado al fracaso», ha defendido Santana.