El Día de la Fraternidad Humana

En menos de un mes, un mundo agobiado celebrará por primera vez el Día Internacional de la Fraternidad Humana, establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas. Este día internacional se celebrará cada año precisamente en el aniversario de la firma del Documento sobre la fraternidad humana por el Papa Francisco y el gran imán de la Universidad de Al-Azhar, Ahmed al Tayyeb, el 4 de febrero de 2019 en Abu Dabi.

Desde entonces, la iniciativa del Papa y del referente religioso de 1.300 millones de musulmanes suníes se ha abierto paso en muchos países de religión islámica. Y ha recibido un inesperado impulso durante la pandemia, ante el triste espectáculo de un presidente que saboteaba las estructuras de cooperación internacional, y de estados que pretendían hacer frente en solitario al coronavirus, perfecto ejemplo de problema global.

Con la encíclica Fratelli tutti, Francisco ha dirigido al mundo un llamamiento similar al de la Pacem in terris de Juan XXIII, escrita con el telón de fondo de la construcción del Muro de Berlín en 1961 y la crisis de los misiles de Cuba en 1962. La crisis actual es triple: sanitaria y económica a causa del virus, y ecológica por el consumo insensato de petróleo, carbón y gas.

La fraternidad universal que propone Francisco es más que una medicina urgente. Es traer a primer plano el mensaje central del Evangelio y resumen de los mandamientos: «Amarás a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a ti mismo». Por fortuna, cada vez abundan más los gestos de fraternidad entre personas de distintas religiones, razas o nacionalidades. Pero, por desgracia, los populismos políticos –verdadera plaga del siglo XXI– trabajan en contra, fomentando la división entre países y dentro del propio.

Ante el cuadro general, Francisco pide en su última encíclica «que la catequesis y la predicación incluyan de modo más directo y claro el sentido social de la existencia, la dimensión fraterna de la espiritualidad, la inalienable dignidad de cada persona, y las motivaciones para amar y acoger a todos».