El arzobispo de Toledo habla sobre el sacerdote detenido con cocaína: «Ninguno estamos libres de caer»

En una carta remitida a todos los sacerdotes, el arzobispo de Toledo ha reconocido que «estamos atravesando una situación muy dolorosa en nuestra diócesis a raíz de la puesta a disposición judicial de Carlos Loriente». Ha invitado a aprovechar «este dolor» y transformarlo en una ocasión de «acoger la llamada a la conversión que el Señor nos hace a cada uno y a nuestra diócesis».

En este sentido, Francisco Cerro ha recordado el lema del sínodo diocesano que están celebrando en Toledo, Volver al amor primero, al mismo tiempo que ha asegurado que «verdaderamente ninguno estamos libres de caer». Por ello «tenemos que ayudarnos a vivir en santidad, con renovado fervor, nuestro sacerdocio, teniendo como centro a Jesucristo vivo. Revisemos nuestras vidas a la luz del Señor».

Una oportunidad para hacer luz en la interioridad de los sacerdotes será «los retiros por vicarías territoriales» donde el arzobispo espera que los curas puedan «orar y reparar». Junto a esto, Cerro ha instado a dejar de lado «todo lo que nos aparta de Él». Y «no dudéis en pedir ayuda —ha aseverado— si os encontráis en una dificultad porque el enemigo aprovecha la soledad y el aislamiento para envolvernos».

Quedadas para rezar

A modo de ejemplo, ha hablado de la iniciativa de algunos sacerdotes que están quedando estos días para rezar juntos. «Me parece que es una respuesta muy adecuada porque lo que tenemos que hacer es acudir al Señor» y vivir estos momentos con «espíritu de fe, desde la verdad, y con entrañas de misericordia».

Por último, el arzobispo de Toledo ha agradecido a los sacerdotes de su diócesis su «entrega generosa en las distintas tareas que tenéis encomendadas». Muchos de ellos son párrocos, por lo que «os pido que sostengáis a nuestros amados fieles, desde la visión sobrenatural que nos impulsa a la oración, al sacrificio y a la intercesión».

Al final de la misiva, Francisco Cerro se ha acordado de Loriente. Ha pedido oraciones «para que el Señor le acompañe y sostenga en estos momentos y se haga presente en su vida desde la verdad y la misericordia. No nos olvidemos de encomendar a su familia».

Libertad con cargos

El sacerdote Carlos Loriente, que ha sido retirado de todos sus cargos eclesiásticos hasta que se esclarezcan con precisión los hechos, fue detenido por la Policía en un control. Llevaba consigo una cantidad de cocaína rosa, conocida como tusi, que superaba la cantidad prevista para consumo propio, por lo que podría ser acusado de un delito contra la salud pública.

Por eso, fue puesto a disposición judicial. Pero poco después fue liberado —con cargos— tras negarse a declarar. El Arzobispado sacó un comunicado reconociendo lo sucedido, pidiendo perdón y manifestando su intención de colaborar con la justicia.