El Arzobispado de Toledo confirma la detención de uno de sus curas y pide perdón

El Arzobispado de Toledo ha reconocido en un comunicado la detención por parte de la Policía Nacional de un sacerdote en la localidad de Torremolinos (Málaga). Pero ha desmentido que el cura en cuestión sea Álvaro García Paniagua, rector del Seminario Mayor de Toledo, como han publicado algunos medios de comunicación.

Al parecer, el presbítero portaba tusi, la conocida como cocaína rosa, en una cantidad que excedía el consumo propio. Por ello, los agentes decidieron trasladarse al piso turístico que tenía alquilado el sacerdote junto con tres hombres de origen latinoamericano. Allí encontraron más droga y una balanza de precisión, por lo que los agentes habrían acusado al detenido de un delito contra la salud pública. Asimismo, en el inmueble aparecieron supuestamente diferentes juguetes sexuales.

Apartado de su oficio

Ante lo ocurrido, el Arzobispado «lamenta profundamente los hechos que han causado la detención y reprueba cualquier conducta delictiva que presuntamente hubiera podido cometer el sacerdote». Para esclarecer los hechos, la Iglesia local «ha abierto investigaciones y le ha apartado cautelarmente del ejercicio del ministerio y de su oficio».

No obstante, el comunicado eclesial «expresa su confianza en la justicia». Aclara que, «aunque considera que la responsabilidad de los hechos corresponde al ámbito personal del detenido, manifiesta su disposición a colaborar con ella».

El Arzobispado de Toledo concluye con una petición expresa de «perdón al pueblo de Dios por los daños morales que puedan ocasionar los presuntos delitos de un sacerdote de la archidiócesis».