El Papa confirma que los seminarios italianos deben rechazar a los aspirantes homosexuales

El Papa confirma que los seminarios italianos deben rechazar a los aspirantes homosexuales

Las palabras de Francisco no difieren de lo que ha sido la posición oficial del Vaticano desde 2005 y van en línea con la Ratio fundamentalis, que guía la formación de todos los seminarios del mundo

Victoria Isabel Cardiel C.
El Papa se ha reunido recientemente con los obispos italianos
El Papa se ha reunido recientemente con los obispos italianos. Foto: CNS.

El pasado 20 de mayo unos 230 obispos italianos se reunieron durante 90 minutos con el Papa en el Aula del Sínodo del Vaticano junto con otros miembros del clero y algunos ayudantes. No era una charla informal entre amigos, pero sí una cita privada, a puerta cerrada y, por tanto, sin periodistas. Sin embargo, alguno de los participantes, o varios, han filtrado a dos medios de comunicación italianos las consideraciones que hizo el Pontífice cuando le preguntaron específicamente qué debían hacer si un homosexual declarado llama a la puerta para entrar en el seminario.

Según las reconstrucciones de los diarios Repubblica e Il Corriere della Sera, Francisco, cuya lengua materna es el español —no el italiano—, y que a menudo utiliza un lenguaje coloquial en la conversación, sorprendió a los obispos al utilizar la palabra italiana frociaggine, que es un término despectivo para designar a los homosexuales. Podría traducirse como «ambiente maricón».

No está claro si el Papa era consciente del carácter ofensivo de la palabra. Aunque, por ejemplo, Il Corriere della Sera cita varias fuentes de los obispos que consideraron que su fatídica frase fue recibida con algunas «risas incrédulas» ya que «era evidente que el Papa no era consciente de lo ofensiva que resulta esa palabra en italiano». De hecho, la expresión contrasta con la frase «¿quién soy yo para juzgar?», que pronunció en el avión de regreso de la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en 2013.

Para el experto vaticanista John L. Allen Jr., editor de Crux, las «declaraciones de Francisco a la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) se consideran privadas, por lo que el Vaticano no publicará una transcripción oficial». Sin embargo, considera que fue un error de cálculo del Pontífice, que no pensaba que sus palabras saldrían a la luz. «Ciertamente, un Francisco conocedor de los medios de comunicación habría comprendido que cualquier cosa que dijera en ese espacio era poco probable que se quedara allí», ha destacado.

En todo caso, sus palabras no difieren de lo que ha sido la posición oficial del Vaticano desde 2005, cuando la Congregación para la Educación Católica, con la aprobación de Benedicto XVI, emitió un documento sobre la cuestión, titulado Instrucción relativa a los criterios para el discernimiento de las vocaciones con respecto a las personas con tendencias homosexuales en vista de su admisión al seminario y a las órdenes sagradas. El documento fue refrendado posteriormente por Francisco en 2016.

No era la primera vez que el Papa se reune con los miembros de la Conferencia Episcopal Italiana antes de que celebrasen su asamblea general. De hecho, es el obispo de Roma y, aunque no pertenezca directamente a la CEI, es su custodio. Las declaraciones del Papa fueron publicadas por primera vez por Dagospia, un medio especializado en información confidencial y primicias, y posteriormente por los principales diarios italianos, La Repubblica y Corriere della Sera, pero no han sido confirmadas oficialmente.