Diálogo, educación y trabajo frente a los conflictos - Alfa y Omega

Diálogo, educación y trabajo frente a los conflictos

En muchos lugares encontramos a hermanos nuestros gritando «de dolor y desesperación». No podemos apartar la mirada

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Siria, Irak, Afganistán, el Líbano, Myanmar, Tierra Santa, Tigray, el Sahel, Sudán… Son muchos los lugares de la tierra hacia los que mirar al terminar este 2021 y en los que encontrar a hermanos nuestros gritando «de dolor y desesperación», como recordó Francisco en su bendición urbi et orbi de Navidad. No podemos apartar la mirada ni taparnos los oídos. Sin tomar «atajos», hemos de intentar siempre que se abran «los caminos más lentos del diálogo». Son los únicos que puede llevar a una solución de los conflictos y que generan «beneficios compartidos y duraderos».

En el mensaje para la LV Jornada Mundial de la Paz, que se celebra este sábado, solemnidad de Santa María, Madre de Dios, el propio Papa incide en que sin diálogo es imposible construir «proyectos compartidos». Hace falta confrontar posturas y buscar acuerdos para avanzar juntos, implicando a las distintas generaciones. Solo contando con los mayores y los jóvenes –a los que el Pontífice llama «depositarios de la memoria» y «continuadores de la historia», respectivamente– se podrá labrar «la dura y estéril tierra del conflicto y la exclusión» para cultivar «semillas de paz» que den fruto.

En esta línea, el Papa pide encarecidamente a las administraciones que inviertan más en educación de calidad que en partidas como el armamento. La enseñanza produce «esperanza, riqueza y progreso», pues cohesiona a las sociedad y abre las puertas al mundo laboral, que es otra área a la que dedicar esfuerzos para garantizar el desarrollo de los pueblos. Tirando de doctrina social de la Iglesia, el Pontífice tilda de «urgente» pelear por «condiciones laborales decentes y dignas» para todos, asegurando «la libertad de las iniciativas empresariales» al tiempo que se potencia «una responsabilidad social renovada» que ve más allá retorno económico…

Ahora que empieza un nuevo año, ¿nos ponemos manos a la obra?