Bollywood también pone a los cristianos en el punto de mira - Alfa y Omega

Bollywood también pone a los cristianos en el punto de mira

Se acaba de estrenar una película crítica contra las conversiones al cristianismo rodada en la lengua de Orissa, el estado donde en 2008 una oleada de violencia anticristiana acabó con la vida de un centenar de personas

María Martínez López
Cartel promocional de la película
Cartel promocional de la película.

Las Iglesias cristianas de la India han condenado el estreno el pasado viernes de una película que presenta de forma denigrante la conversión al cristianismo. El hecho es aún más grave porque la cinta está rodada en odia, la lengua del estado de Orissa, tristemente célebre por la oleada de violencia anticristiana de 2008, en la que falleció un centenar de personas.

El largometraje «representa de forma falsa la conversión religiosa como una actividad delictiva». Por ello, «mina la libertad de religión», ha denunciado el National United Christian Forum, que congrega a obispos católicos, ortodoxos, protestantes y evangélicos. También distorsiona «aspectos clave de la doctrina cristiana».

El título ya es toda una declaración de intenciones: Sanatani. Karma hi Dharma. Sanatani es la palabra en sánscrito para los hindúes. A ellos, les dice «el deber es religión». El argumento se desarrolla en el contexto de aldeas tribales y gira en torno a la conversión al cristianismo y a la hechicería. Por ello, el National United Christian Forum señala que puede «alimentar las divisiones entre las comunidades tribales».

Protestas no cristianas

La comunidad cristiana de Kandhamal, el distrito donde ocurrieron los ataques en 2008, había pedido al ministro jefe de Orissa, Mohan Charan Majhi, que impidiera el estreno de la película. Según explica a UCA News el sacerdote católico Manoj Kumar Nayak, en todo el estado «ha aumentado la preocupación y el miedo entre nuestra gente».

Otro sacerdote del estado, Dibakar Parichha, añade que también grupos no cristianos pidieron que intervinieran los tribunales para impedir que la película llegue a verse, pues la consideran una amenaza al orden público. Sin embargo, el 5 de febrero el Alto Tribunal de Orissa se negó a tomar medidas preliminares.

El protagonista del largometraje, Sambit Acharya, ha declarado a los medios que en él «no hay nada contra ninguna religión», pero ha reivindicado que «pone el foco en las conversiones religiosas. Solo hemos mostrado lo que la realidad es».

Kandhamal, como otras zonas tribales, tiene un porcentaje de cristianos superior a la media de la India. En este caso, el 20 % de sus 750.000 habitantes. El resto de la población se divide entre hindúes, la mayoría, y animistas. Dentro de su campaña contra todo tipo de presunto proselitismo, los grupos nacionalistas hindúes tienen en el punto de mira particularmente la presencia cristiana en estos contextos. Afirman que los misioneros se aprovechan de personas pobres y de castas bajas para atraerlos al cristianismo.

«Cualquier intento de dividir a estos grupos se podría ver como un intento malicioso de minar su derecho fundamental a la tierra, el agua y el bosque», afirman los obispos del National United Christian Forum. Se refieren a que las luchas religiosas entre ellos, alimentadas desde fuera, pueden impedir que unan fuerzas para defenderse respecto a sectores sociales más poderosos.