A los obispos de Filipinas les preocupa la reforma de la Constitución anunciada por Duterte - Alfa y Omega

A los obispos de Filipinas les preocupa la reforma de la Constitución anunciada por Duterte

Redacción
Foto: CBCP News

Los obispos de Filipinas han demostrado esta semana su preocupación por las nuevas medidas que quiere implementar el presidente el país, Rodrigo Duterte. Durante la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal, han pedido vigilancia pública en las posibles propuestas de cambios en la Constitución.

Duterte se encuentra en medio de su declarada «guerra contra las drogas» —que ya ha dejado un rastro de 6.000 asesinatos de pequeños traficantes—. En este marco, ha insistido numerosas veces en que no dudará en declarar la ley marcial si lo cree necesario para proteger a la nación. Para no necesitar el permiso del Congreso y el Tribunal Supremo, quiere cambiar la Constitución del país.

Ante estas declaraciones, los obispos filipinos han afirmado que la Constitución es «el documento más importante de nuestro país» y que los cambios deben hacerse teniendo en cuenta a la población. «El proceso de modificar la Constitución no debería dejarse a políticos o a aquellos que por elección o nombramiento tendrán que redactar las enmiendas», ha dicho monseñor Sócrates Villegas, presidente de la Conferencia Episcopal. Los obispos también se han ofrecido a dar orientación pastoral en los posibles cambios en la Constitución.

Por otro lado, se oponen a la propuesta del presidente de rebajar la edad mínima de responsabilidad criminal. Esta se sitúa ahora en los 15 años y Duterte quiere modificarla a los 9 años. Monseñor Villegas ha dicho que el Gobierno, en lugar de tomar estas medidas, debe ir detrás de las mafias, que son las que explotan a niños vulnerables. El motivo dado por el presidente para reducir la edad para ser considerado judicialmente como un adulto, es el aumento de crímenes entre los jóvenes. Los obispos le piden al Gobierno que recapacite esta postura, ya que consideran que esta reducción de edad no va a suponer el fin de las mafias.

CBCP / Redacción