Viacrucis por los menores migrantes
Bilbao ha acogido un año más el viacrucis intercultural, que este año ha puesto rostro a los niños más vulnerables
Los menores migrantes, los niños vulnerables y sin voz, han sido los protagonistas del viacrucis intercultural que varios grupos de la diócesis de Bilbao han organizado en la tarde del sábado en la capital vizcaína en la Parroquia de Santos Justo y Pastor, de Otxarkoaga. Han participado grupos de Deusto, San Ignacio, Otxarkoaga, Quinta Parroquia, la Fundación Ellacuría, el Txoko Latino y la Delegación diocesana de Migraciones.
Para seguir visibilizando la situación de los menores migrantes que llegan a Europa, muchos de ellos solos, cada grupo ha preparado una estación del recorrido de Jesús hasta la cruz. Algunos escenificaban el tema, otros presentaban una canción, un gesto o un símbolo. Chukirawa Mera, del área de Migraciones de Bilbao, explica que uno de los objetivos de la convocatoria era unir a «toda la comunidad cristiana» en este tema.
La preparación del viacrucis se produjo el mes pasado en un retiro que celebraron las organizaciones convocantes. Lejos de ser una novedad, sin embargo, el viacrucis intercultural se ha convertido en los últimos años en tradición durante el tiempo de Cuaresma y como preparación para la Semana Santa.