100.000 niños murieron o fueron mutilados en conflictos entre 2005 y 2020 - Alfa y Omega

100.000 niños murieron o fueron mutilados en conflictos entre 2005 y 2020

UNICEF presentó este martes el informe 25 años de conflictos armados y la infancia: Actuar para proteger a los niños en la guerra

Redacción
Niños soldado en Sudán del Sur. Foto: Unicef/Sebastian Rich.

UNICEF denunció este martes, en un nuevo informe recogido por la agencia Servimedia, más de 266.000 violaciones graves contra la infancia cometidas en más de 30 situaciones de conflicto en África, Asia, Oriente Medio y América Latina entre 2005 y 2020.

Esta cifra represente solo una parte de todas las violaciones que se cree que se han producido, ya que las limitaciones en materia de acceso y seguridad, entre otras, y la vergüenza, el dolor y el miedo que sufren los niños y las familias supervivientes dificultan la denuncia, la documentación y la verificación de éstas.

El informe 25 años de conflictos armados y la infancia: Actuar para proteger a los niños en la guerra revela que, entre 2005 y 2020, más de 104.100 niños han sido asesinados o mutilados en situaciones de conflicto armado, más de 93.000 han sido reclutados y al menos 25.7000 niños han sido secuestrados. Además, alrededor de 14.200 han sido violados, casados a la fuerza, explotados sexualmente y sometidos a otras formas graves de violencia sexual.

Entre 2016 y 2020, los agentes estatales, incluidas las fuerzas y coaliciones nacionales e internacionales, fueron responsables de al menos el 26 % de todas las violaciones. En comparación, los agentes no estatales fueron responsables de hasta el 58 % de todas las violaciones verificadas, lo que destaca la importancia de comprometerse con todas las partes en conflicto, incluidos los agentes no estatales, para poner fin y prevenir de forma contundente las violaciones contra la infancia.

El aumento en el número de agentes armados no estatales, el desarrollo y el empleo de nuevos medios y métodos de guerra, el uso de artefactos explosivos improvisados y otras armas explosivas, en particular en zonas pobladas, son solo algunos de los numerosos factores que contribuyen a que hayan surgido nuevos problemas graves que dificultan la protección de los niños en situaciones de conflicto armado.

Las recomendaciones del informe, basadas en las pruebas y los análisis presentados, tienen por objeto movilizar a todas las partes interesadas, incluidas las partes en conflicto, los Estados y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, «para proteger a los niños de forma eficaz y sostenible y acelerar la acción a nivel local, nacional, regional y mundial».

Asimismo, pretende hacer un llamamiento a las partes en conflicto y a los Estados para que cumplan con sus obligaciones en virtud de los derechos humanos internacionales y el derecho humanitario.