Una familia ucraniana y una rusa, juntas en el vía crucis del Papa - Alfa y Omega

Una familia ucraniana y una rusa, juntas en el vía crucis del Papa

Han preparado una reflexión conjunta en el que le preguntan al Señor «¿por qué has abandonado a nuestros pueblos?»

Redacción
El Papa durante el vía crucis en el Coliseo de 2019.

El Vaticano ha publicado este lunes el texto del vía crucis en el Coliseo que presidirá el Papa Francisco el viernes 15 de abril, Viernes Santo. Un vía crucis que ha sido preparado por distintas familias y que se enmarca dentro del Año Familia Amoris laetitia, que la Iglesia celebra hasta el próximo 26 de junio de 2022.

Concretamente, las reflexiones que acompañan a cada una de las estaciones han sido elaboradas por un matrimonio joven, por una familia en misión, por un matrimonio anciano sin hijos o por una familia de migrantes, entre otros perfiles. Pero de entre todos los textos destaca, por su simbolismo, el de la estación decimotercera, Jesús muere en la cruz, que ha sido escrito conjuntamente por una familia ucraniana y una familia rusa.

El texto comienza subrayando que «la muerte está en torno y la vida parece perder valor. Todo cambia en pocos segundos. La existencia, los días, la despreocupación de la nieve en invierno, ir a buscar a los niños a la escuela, el trabajo, los abrazos, las amistades, todo. Todo pierde improvisamente valor», escriben estas dos familias, que portarán juntas la cruz de Jesús durante todo el tiempo que dure esta estación.

La reflexión continúa con una retahíla de preguntas lanzadas directamente al Señor: «¿Dónde estás? ¿Dónde te escondiste? Queremos la vida de antes. ¿Por qué todo esto? ¿Qué culpa cometimos? ¿Por qué nos has abandonado? ¿Por qué has abandonado a nuestros pueblos? ¿Por qué has dividido de este modo a nuestras familias? ¿Por qué ya no tenemos ganas de soñar ni de vivir? ¿Por qué nuestras tierras se han vuelto tenebrosas como el Gólgota?».

Preguntas que, sin embargo, todavía no han obtenido una respuesta, por lo que le piden a Dios que les hable «desde el silencio de la muerte y de la división», y que les enseñe «a reconciliarnos, a ser hermanos y hermanas, a reconstruir lo que las bombas habrían querido aniquilar».

Antes de concluir, ucranianos y rusos escriben: «Se nos acabaron las lágrimas. La rabia ha cedido a la resignación. Sabemos que Tú nos amas, Señor, pero no percibimos este amor, lo que nos hace enloquecer. Nos despertamos en la mañana y por algunos segundos somos feliz, pero luego nos acordamos inmediatamente de que será difícil reconciliarnos. Señor, ¿dónde estás?».

Semana Santa del Papa

Francisco preside este año su décima Semana Santa en el Vaticano. El Jueves Santo el Santo Padre abrirá el Triduo Pascual con la Misa Crismal en la basílica de San Pedro. La oficina de prensa del Vaticano todavía no ha confirmado si Francisco va a desplazarse por la tarde, como otros años, hasta una cárcel de Roma, para lavarle los pies a un grupo de reclusos e imitar así a Jesús en la Última Cena.

El año pasado, el Pontífice celebró los oficios del Jueves Santo en la capilla privada de la residencia del destituido cardenal Angelo Becciu, acusado por la fiscalía del Vaticano de malversación de fondos y extorsión en el juicio por la compra irregular de un inmueble en Londres.

El Viernes Santo Francisco estará presente en la celebración de la Pasión del Señor, mientras que, por la noche, acudirá al Coliseo de Roma para presidir el vía crucis. El sábado entrará en procesión a la basílica de San Pedro, a oscuras, portando el cirio pascual para celebrar la Vigilia Pascual y finalmente, el Domingo de Resurrección, Francisco presidirá la Misa en la Plaza de San Pedro a las 10:15 horas, tras la cual dará al mundo entero la bendición Urbi et Orbi.