Un español avanza por la cuarta vía de canonización

El religioso español Pedro Manuel Salado, de la Familia del Hogar de Nazaret, podría convertirse en el primer siervo de Dios en ser beatificado por la cuarta vía decretada por el Papa Francisco en 2017: la de la entrega de la propia vida y la aceptación por amor de una muerte segura a corto plazo.

Pedro Manuel Salado, cuya causa de canonización en fase diocesana se cierra este sábado en la catedral de Córdoba, falleció el 5 de febrero 2012 en la playa de Esmeraldas, en Ecuador, después de rescatar del mar a siete niños acogidos en la institución a la que pertenecía. Cuando de repente un remolino se los llevó mar adentro, el religioso se lanzó al agua diciendo: «Tengo que salvar a mis niños», y los fue sacando uno por uno. Cuando acabó fue llevado hasta la orilla, donde falleció exhausto.

Hoy su devoción y su fama de santidad se han extendido tanto por Ecuador como por España, «y sigue creciendo», asegura Miguel Varona, el postulador de su causa, que menciona «un favor muy destacado que esperamos que se pueda estudiar próximamente» a medida que avanza el proceso, ya en fase romana.

Para Varona, el testimonio que dejó el religioso «es como un iceberg», pues lo llamativo de su fallecimiento «es solo una pequeña parte de lo que era él». Después de haber entrevistado a casi 40 testigos y de haber accedido a sus escritos, su postulador afirma que el ofrecimiento final de Pedro Manuel Salado «no fue algo improvisado. Eso no lo hace cualquiera. Fue la culminación de toda una vida entregada en lo cotidiano». Pedro Manuel «fue poco a poco creciendo en el amor a Dios y a los más pequeños, y eso tuvo un broche final en el momento de su muerte. Pero el suyo es un ejemplo de entrega en el silencio del día a día».