Aunque en España hablar de Telepasión remite inmediatamente a conocidos rostros de la pequeña pantalla haciendo su karaoke particular en Navidad, lo cierto es que sigue habiendo en Semana Santa una peculiar pasión televisiva que, salvando todos los tiempos y las distancias, permite que las parrillas sigan oliendo a Ben-Hur y a torrijas. Para paliar el chasco de tener que esperar más de lo previsto con el estreno en plataformas de la cuarta temporada de The Chosen, TVE se marca un tanto esta semana y lanza la primera entrega, en la tele de toda la vida y en RTVE Play. Me cuesta creer que haya todavía quien no la conozca, al menos de oídas, pero The Chosen es esa serie americana, creada por Dallas Jenkins en 2017, que se hizo gigante partiendo de una fórmula que contaba con miles de pequeñas donaciones en todo el mundo y que nos cuenta la vida y obra de Jesús con el protagonismo inequívoco de los apóstoles; unos elegidos para la gloria, que es, al fin y al cabo, la esencia de toda vida cristiana.
Sé que no es católica y que, como todo relato de ficción, no le podemos pedir que sea Palabra de Dios, pero yo soy de los que, sin tomarla por lo que no puede ser, disfruto de The Chosen. Sé también que la serie tiene muchos seguidores y también algunos detractores, así que, si no la tienen entre sus prioridades, por mucho que la tele pública nos la ponga en bandeja, apunten algunas de las opciones que ofrece la cartelera cinematográfica de TRECE que, además despliega una programación especial de más de 50 horas durante toda la semana. El Jueves Santo, a las 15:40 horas, En busca de la tumba de Cristo (2006): el viernes, a las 22:45 horas, un clásico de 2004, La Pasión de Cristo; el sábado, a las 19:30 horas, La historia más grande jamás contada (1965) y el domingo, a las 15:30 horas, el Jesús de Nazaret, de Zefirelli (1977). Esto sí que es, verdaderamente, una semana grande.