Sudáfrica despide a Desmond Tutu, «un gigante moral y espiritual» - Alfa y Omega

Sudáfrica despide a Desmond Tutu, «un gigante moral y espiritual»

Un centenar de personas homenajea en una ceremonia sencilla al arzobispo que combatió el apartheid

Yago González
Funeral en la catedral de San Jorge, en Ciudad del Cabo (Sudáfrica). Foto: RTS.

Un centenar de familiares, amigos y líderes políticos y sociales (el aforo fue limitado por la COVID-19) se reunieron este sábado en la catedral de San Jorge, en Ciudad del Cabo, para celebrar el funeral de Estado de Desmond Tutu, fallecido el pasado domingo a los 90 años. Tutu, arzobispo anglicano, destacó por su combate contra el régimen racista del apartheid en Sudáfrica y su apasionada defensa de la reconciliación nacional, lo que le valió el Premio Nobel de la Paz en 1984. A lo largo de esta semana se han sucedido las palabras de reconocimiento al religioso desde todos los rincones del mundo. No obstante, su funeral fue modesto: antes de morir, Tutu pidió un servicio sencillo y el ataúd más barato disponible.

En su discurso de homenaje, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, definió a Tutu como «un hombre de una fe tan profunda como duradera», así como la «conciencia nacional» del país. «Fue un cruzado en la lucha por la libertad, por justicia, igualdad y paz, no solo en Sudáfrica, sino también en todo el mundo», aseguró Ramaphosa, según informa CNN.

El presidente señaló que el arzobispo concibió Sudáfrica «como una “nación arco iris”, emergiendo de la sombra del apartheid, unida en su diversidad, con libertad e igualdad de derechos para todos». «Abrazó a todos los que alguna vez habían sentido el viento frío de la exclusión y ellos a su vez lo abrazaron», afirmó Ramaphosa, que destacó la defensa de Tutu de los derechos LGBT y la causa palestina, además de su oposición al matrimonio infantil. «La suya fue una vida vivida de manera honesta y completa. Ha dejado al mundo como un lugar mejor. Lo recordamos con una sonrisa», dijo el líder sudafricano.

La hija de Tutu, Naomi, también rindió homenaje a su padre: «Gracias, Papá, por las muchas formas en que nos mostraste amor, por las muchas veces que nos desafiaste, por las muchas veces que nos consolaste».

El reverendo Michael Nuttall, obispo retirado de Natal que trabajó como ayudante de Tutu entre 1989 y 1996, le definió como un «gigante entre nosotros, moral y espiritualmente». Según Nuttall, el fallecido «tocó la fibra sensible tal vez en los corazones y las mentes de muchas personas: un líder negro dinámico y su adjunto blanco en los últimos años del apartheid; fuimos un anticipo, por así decirlo, de lo que podría haber en nuestra descarriada y dividida nación».

En un mensaje de video reproducido en la ceremonia, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dijo que un arzobispo de Canterbury que rinde homenaje al arzobispo Tutu era «como un ratón que rinde tributo a un elefante».