Shevchuk dice que un acuerdo de paz en Ucrania es «imposible»
Para el arzobispo mayor de la Iglesia greco-católica ucraniana, Rusia sencillamente «niega el derecho de Ucrania a existir»
Decenas de miles de muertos y heridos después, la invasión de Rusia en Ucrania —que acaba de cumplir dos años— sigue en un punto muerto. La guerra ha impuesto un enorme frente de trincheras de 800 kilómetros que no ha logrado en los últimos meses avances significativos y ha colocado a Ucrania en un difícil escenario. En este contexto, crecen las voces de los que abogan por sentarse a negociar y dejar a un lado las armas. El Papa es uno de ellos. El pasado miércoles, durante la audiencia general, volvió a reclamar que se activaran «todos los esfuerzos» para poner fin a todos los conflictos, y, en concreto, a los de Ucrania y Tierra Santa. «No lo olvidemos nunca. La guerra es siempre una derrota. No puede continuar la guerra. Debemos hacer todos los esfuerzos para negociar, para poner fin a la guerra. Recemos por ello», zanjó.
Sin embargo, las condiciones para lograr un acuerdo de paz en Ucrania son hoy una posibilidad inalcanzable. Así lo ha puesto de manifiesto el arzobispo mayor de la Iglesia greco-católica ucraniana, Sviatoslav Shevchuk, quien ha ido incluso más allá y ha afirmado que es «imposible» porque «Rusia no considera a Ucrania un tema de diálogo» sino que «niega el derecho de Ucrania a existir».
En un comunicado enviado a los medios de comunicación el lunes, Shevchuk ha dejado claro que mientras Rusia niegue los fundamentos del derecho internacional, será imposible un acuerdo de paz.
«A menudo oímos hablar de negociaciones como alternativa a la confrontación militar. Pero volvamos a intentar comprender: ¿Qué obstaculiza las negociaciones? ¿Es posible el diálogo entre Rusia, un país agresor, un país terrorista, y Ucrania?», ha dicho Shevchuk en la declaración.
Del mismo modo, ha defendido que cualquier acuerdo internacional de alto el fuego debe basarse en las normas y principios del derecho internacional. «Mientras Rusia, como agresor, niegue los fundamentos del derecho internacional, será imposible un acuerdo de paz», ha asegurado a este respecto.
Así ha asegurado que Ucrania, desde el comienzo de la guerra ha actuado «como una parte que buscaba el diálogo». «Por iniciativa del presidente de Ucrania, se hizo todo lo posible para detener al agresor mediante negociaciones. Sin embargo, el mundo entero ha visto que Rusia no considera a Ucrania un tema de diálogo, y más aún, niega el derecho de Ucrania a existir», ha destacado.
La ONU destacó en un informe la semana pasada que Rusia había tejido un clima omnipresente de miedo en las áreas que ocupa en el territorio de Ucrania, donde ha cometido violaciones generalizadas del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos para consolidar su control sobre los residentes.
El estudio difundido el pasado miércoles por la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas —basado en más de 2.300 entrevistas con víctimas y testigos— reveló las tácticas que Rusia ha utilizado para imponer el ruso como idioma y como ciudadanía, así como sus leyes, su sistema judicial y sus planes de estudios —que incluyen justificaciones del ataque armado contra Ucrania— en esas regiones ocupadas. «Las acciones de la Federación Rusa han destruido el tejido social de las comunidades y han dejado a personas aisladas, con consecuencias profundas y duraderas para la sociedad ucraniana en su conjunto», señaló el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, al publicarse el informe.