Se confirma que el aeródromo acogerá la Vigilia y la Misa de Clausura de la JMJ: Será en Cuatro Vientos
El Gobierno ha confirmado al Comité Organizador de la JMJ que pueden contar con el aeródromo militar de Cuatro Vientos para acoger la Vigilia y la Misa de clausura de la JMJ en 2011. En cuanto al resto de los actos, se desea que se celebren en el entorno de la Castellana, aunque todavía está sin decidir

El aeródromo militar de Cuatro Vientos se ha convertido, para la actual generación de jóvenes católicos españoles, en un icono de su pertenencia a la Iglesia y su cariño al Papa. En el año 2003 ya acogió a casi un millón de jóvenes en el encuentro con el Papa Juan Pablo II durante la última visita de éste a España, y dentro de dos años volverá a ser lugar de encuentro entre el Vicario de Cristo y los jóvenes católicos; esta vez, procedentes de todo el mundo. El Gobierno, con el visto bueno del Ministerio de Defensa, ha confirmado que la Vigilia de la Jornada Mundial de la Juventud, el sábado 20 de agosto de 2011, y la Misa de clausura al día siguiente, tendrán lugar allí. El aeródromo es lo suficientemente amplio para acoger al millón y medio de jóvenes que se espera que acudan; y, a la vez, está bien comunicado con la ciudad.
Con esta noticia, se confirma el lugar de los dos actos más multitudinarios. Por otro lado, el Comité Organizador pretende que el acto de acogida del Papa, el jueves 18 de agosto, sea en el mismo lugar donde, dos días antes, el arzobispo de Madrid, cardenal Antonio María Rouco, haya inaugurado la JMJ y donde, el viernes, dé comienzo el vía crucis. Según declaraciones a Alfa y Omega de don Santiago de la Cierva, Director de Comunicación de la JMJ, para estos actos se barajan Cibeles, Colón, Plaza de Castilla y la zona de las Cuatro Torres, cercana a la estación de Chamartín; cuatro «espacios amplios y bien comunicados», todos ellos en torno a la Castellana, que se baraja como uno de los ejes de la JMJ. Sin embargo, de momento se trata sólo de deseos, pues, para concretarlos hay que contar con el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid.
El hecho de juntar tres actos en un mismo lugar simplificará los preparativos. El señor De la Cierva es consciente de que «ésta va a ser una JMJ marcada por la crisis». Sin embargo, también ve en ello algún elemento positivo: más allá de los grandes donativos, «damos mucha más importancia a las pequeñas ayudas. Queremos que la JMJ se apoye en la solidaridad general, contamos con que mucha gente nos ayude con pequeñas cantidades o con donativos en especie».