Sacerdote iraquí en España: «El viaje del Papa es un acto de valentía que da esperanza»
El sacerdote iraquí Naim Shoshandy, párroco de la iglesia de Santa Ana, en Albacete, reflexiona sobre la próxima visita del Papa a Irak
Naim Shoshandy suele definir al 6 de agosto de 2014 como «el día de la maldad y la crueldad». Tiene una explicación. Ese día el Daesh invadió la ciudad de Karakos, donde vivía. Las bombas cubrieron el cielo y él mismo tuvo que sacar de los escombros los cuerpos sin vida de varias jóvenes y niños, vecinos suyos, que habían sucumbido ante las explosiones. Shoshandy, que es sacerdote siro católico, terminó saliendo de Irak y recaló en España. Ahora ejerce como párroco en la iglesia de Santa Ana, en Albacete, y atiende a este periódico pocos días antes de que el Papa recale en su país. Será el primer viaje internacional de Francisco desde noviembre de 2019 y el primero de un pontífice al país que vio nacer a Abraham.
¿Qué supone para ti el viaje del Papa a Irak?
Que el Papa Francisco viaje a Irak es un acto de valentía que da esperanza. Todos estamos emocionados. Llevábamos mucho tiempo esperando. Es un país tan castigado por las guerras, que vive en una continua crisis –especialmente desde la entrada del Daesh en 2013-, que considero la visita como el paso más maravilloso que podía dar el Santo Padre.
¿Y qué supone para el país?
El país está viviendo un momento muy difícil y el Papa llevará una palabra profética que levante el ánimo de todos. Espero que abra los ojos de los ciudadanos iraquíes y que tenga un impacto también en nuestros líderes. Su presencia entre nosotros, que vendrá acompañada de su solidaridad y su oración, nos da esperanza para el futuro.
Además, su visita influirá en toda la región, que vive un momento crucial por las muchas dificultades actuales: conflictos, guerras, migración… Ante este panorama, traerá un nuevo ejemplo de hermandad, respeto y convivencia armoniosa a los países vecinos. Los cristianos de Oriente Medio necesitan la presencia y una palabra de su padre.
¿Qué destacarías del programa de la visita?
Será la primera vez que un Papa viaje Irak, la tierra del padre de los profetas Abrahám. Además, Francisco cumplirá el sueño de san Juan Pablo II, que no pudo conocer Ur a finales del año 1999.
El Pontífice visitará Bagdad, capital del país; Ur, patria de Abrahán; Erbil, que pertenece al Kurdistán iraquí; Mosul, la tierra del profeta Jonás; o Qaraqosh, la llanura de Nínive. Son lugares vinculados a la fe cristiana y al martirio de los residentes tras los bombardeos y la represión sufrida por el ISIS. Muchos de ellos han sido restaurados gracias a Ayuda a la Iglesia Necesitada y a la Iglesia española.
En las últimas semanas se han producido varios atentados en la zona. ¿Hay peligro para el Papa durante el viaje?
La situación es compleja y es difícil garantizar la seguridad al cien por cien, pero las medidas de seguridad serán máximas. Confiemos en el Señor en que todo saldrá bien.
¿Qué mensaje cree que están tratando de lanzar los terroristas con estos atentados?
El mensaje que están enviando los terroristas es el mismo de siempre. Están tratando de mostrar la inestabilidad del país y de destruir la fraternidad entre el pueblo iraquí y sus distintas religiones. Y, por supuesto, quieren quitar la esperanza de que podamos salir adelante.
¿Qué te cuentan tus conocidos en el país? ¿Cómo está la situación? ¿Cómo afronta los fieles la llegada del Papa?
Todos están muy ilusionados y contentos con la visita de su Santidad. Es una visita sagrada para nosotros. Lo único que la ensombrece es el miedo al coronavirus, pero se está haciendo todo lo posible por garantizar la seguridad.
Los cristianos y los pueblos de Oriente viven desde hace algún tiempo en un estado de duda, miedo y muchos problemas, y el Papa viene a nosotros para apoyarnos y animarnos. También con la esperanza de mejorar las condiciones. Esta visita es una peregrinación en la que encontramos un mensaje de hermandad y fraternidad.