Rector de Guadalupe: «Este año es la Virgen la que visita a los fieles»

La basílica de Guadalupe, en México, permanecerá cerrada en el día de la fiesta de la Virgen. Este jueves 10 de diciembre comienza la clausura, que se extenderá hasta el domingo 13 de diciembre y que busca «evitar que la basílica se convierta en un lugar en el que la gente se contagie masivamente», explica el rector del templo, monseñor Salvador Martínez Ávila, a Alfa y Omega. «Todas las iniciativas planteadas han surgido desde esta perspectiva y para seguir siendo muy sensibles a la devoción y el cariño que la gente tiene a la Santísima Virgen María de Guadalupe».

¿Cuál es el mensaje de la basílica ante la pandemia que vive el mundo?
Lo que le digo la Santísima Virgen al mismo Juan Diego a propósito de la enfermedad de su tío. «Ten presente hijo mío que es poco lo que te aflige. ¿No estoy yo aquí que soy tu madre? ¿No soy yo vida y salud? ¿No estás por ventura en mi regazo?». Pues eso mismo lo queremos sentir y queremos dejarnos visitar por la Virgen, así como lo hizo con el tío Juan Bernardino, que estaba en su casa muy malo a punto de morir. La Santísima Virgen lo visitó y lo sanó. Este año el evento guadalupano no es solamente venir a la basílica, sino también dejar a la Virgen que vaya a las casas, nos conceda la salud, la armonía y todo lo que necesitamos a propósito de esta pandemia. Este año es la Virgen la que visita a los fieles.

¿Cómo afronta el hecho de tener de tener que cerrar la basílica de Guadalupe entre el 10 y el 13 de diciembre?
Ha sido algo que no resulta totalmente sorpresivo, pero sí muy retador y desafiante. Llevamos desde agosto pensando en las distintas posibilidades y siguiendo lo que sucede en los otros grandes santuarios del mundo. La idea no era cerrar, pero tenemos el deber de ser responsables y evitar que la basílica se convierta en un lugar en el que la gente se contagie masivamente. Todas las iniciativas planteadas han surgido desde esta perspectiva y para seguir siendo muy sensibles a la devoción y el cariño que la gente tiene a la Santísima Virgen María de Guadalupe.

¿Cuáles son las iniciativas planteadas?
Se ha propuesto a los devotos que escalonen sus peregrinación a la basílica. La idea es que pudieran agendar su visita a la Virgen entre los meses de noviembre y enero para tratar de evitar concentraciones el día de Guadalupe.

Para facilitar este cambio de planes, llevamos todo el mes de noviembre cantándole las mañanitas a la Virgen. Es una promesa que la gente le hace a la Virgen, una forma muy cariñosa de saludar a una mamá, y para facilitar a los fieles que la pueda cumplir, le cantamos las mañanitas todos los días antes de la Misa de las 06:00 h. y también después de Misa de 19:00 horas.

Otra tradición muy arraigada es la antorcha guadalupana, que se enciende en la basílica y se va llevando por relevos hasta la casa de los fieles. Es una forma de ofrecerle cariño a la Santísima Virgen y hacer un signo de vinculación entre la casita del Tepeyac y su pueblo. Participan sobre todo jóvenes. Pues la basílica les ha ofrecido toda clase de materiales rituales y también catequéticos para que ellos puedan vivir esta devoción en su propia región partiendo desde alguna iglesia o santuario local. Además, los grupos de antorchistas se inscriben en la página web de la basílica como para decir «este año vamos a vivir la tradición de otra manera, pero queremos manifestar nuestra presencia ante la Virgen».

¿Qué le va a pedir usted de forma concreta a la Virgen el día de su fiesta?
En tiempos difíciles suelen aparecer muchas tentaciones de conflicto y de desesperación. Así que con alegría le voy a pedir a la Virgen que nos conserve a todos en mucha unidad, que nos ayude a ser fuertes y permanecer juntos, poniendo todo de nuestra parte y aceptando lo que Dios quiere darnos también.