Pedro del Castillo: «Llegar pronto a casa para bañar a tus hijos es de héroes»
El periodista e influencer optó por cambiar de trabajo para no perderse la infancia de sus hijos. Ahora narra su experiencia en un libro
¿En qué ha cambiado su vida ser padre?
Yo trabajaba en radio y televisión. Me levantaba a las cuatro de la mañana y lo hacía encantado. Cuando tenía que viajar por toda España o echar jornadas largas, lo mismo: no me importaba, porque estaba cumpliendo mi sueño de hacer algo que me gustaba. Pero al nacer mi hija, los horarios que tenía ya no me daban igual. Con niños aparece la necesidad de la conciliación y ya no era lo mismo irte fuera varios días. Empecé a tener la sensación de que, si seguía con ese ritmo, me la iba a perder.
¿Qué hizo entonces?
En mi empresa me animaron a coger la baja por paternidad completa al principio, las 16 semanas, y eso me dio la posibilidad de enamorarme de la paternidad. Fueron cuatro meses de mucho cambio y comprobé todo el cansancio y las malas noches que se pasan. Pero también empecé a disfrutar mucho los paseos con mi mujer y con la niña, a tener tiempo de calidad, a hacer hogar y a estar muy presente en las cosas de la casa. Eso me estaba encantando y la posibilidad de perderlo me daba mucha pena.
Como una especie de luna de miel familiar.
Sí. Algunos compañeros de trabajo me habían confesado que se arrepentían de haber priorizado lo profesional y de no haber estado más con los suyos. Yo tenía claro que mi éxito en la vida pasaba por estar con los míos. Para eso, había cosas que tenían que cambiar. Pedí a la empresa más conciliación y facilidades. Y, como no se dio, me embarqué en un proyecto más autónomo y con una mayor flexibilidad, priorizando la familia.
¿Y así acabó con casi medio millón de followers en Instagram?
No fue un proyecto pensado ni algo por lo que apostase en un principio. Pero decidí compartir lo que cada día se me estaba regalando en casa. Empecé a hacer un diario como padre primerizo, contando que «hoy ha ocurrido esto…». Y fue creciendo.
¿Qué lecciones ha descubierto desde entonces?
Estos tres años han sido muy ricos en muchos niveles. De mí mismo he descubierto que los cambios son una oportunidad para crecer y mejorar. Dejas de priorizarte a ti mismo como antes. Y, como la mejor manera de educar a los hijos es con el ejemplo, me empeño en ser mejor persona y en desarrollar virtudes que no pensaba que tenía: paciencia, organización, orden.
¿Cómo afecta a su vida hoy el hecho de ser padre?
Por ejemplo, ahora soy mejor profesional de lo que era antes: me organizo con más eficacia y gestiono mejor los tiempos. También creo que soy mejor marido: hemos pasado por crisis y hemos luchado por salir de esos momentos. Ahora notamos que nos queremos más y mejor. También me ha hecho mejor hijo porque he aprendido a valorar la labor de mis padres, el esfuerzo que han hecho conmigo, su amor y delicadeza. Entiendo esas veces en que me gritaron, porque yo también me he visto en situaciones tensas [risas]. Y a nivel espiritual, he comprendido la figura de un Dios Padre que te quiere con toda su misericordia. Al igual que yo educo a mi pequeña y hay cosas que no entiende, ahora veo que el Dios que me ama actúa así porque tiene un plan mejor.
¿Los padres son los superhéroes de nuestros días?
Hay muchas historias inspiradoras que se dan en casa. La familia hace de lo rutinario algo grande y te da la capacidad de ser feliz. Dicho esto, llegar pronto a casa para bañar y dar de cenar a tus hijos es de héroes. Un padre que sale de su zona de confort y se sacrifica por otros es admirable. De hecho, quienes pasan tiempo con sus niños hacen que sean más seguros, positivos y sanos.
No hace mucho a un tipo así se le llamaba peyorativamente «hombre blandengue».
Yo creo que la corresponsabilidad es intentar encontrar un equilibrio con tu pareja, consensuado y hablado. No es un reparto al 50 %, sino algo en lo que ambos estemos de acuerdo y a gusto, con la flexibilidad que cada día trae. Y luego hay un papel especial que tienen las madres y que no tiene sentido que el padre quiera ocupar. Por otra parte, lo primero de lo que se arrepiente la gran mayoría de hombres cuando se acerca la muerte es de no haber pasado más tiempo con sus seres queridos. ¿Por qué darnos cuenta de esto al final? El éxito en la vida pasa por la familia.
Pedro del Castillo
Espasa
2025
256
19,90 €
