«Orgullosos» de pintar las calles para que pase el Santísimo - Alfa y Omega

«Orgullosos» de pintar las calles para que pase el Santísimo

Vuelve a las calles de toda España la tradición de alfombrar con flores, serrín y multitud de elementos naturales el paso del Santísimo por el Corpus Christi

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Ares en el año 2019, durante la celebración del Corpus Christi. Foto: Asociación Alfombras Florales de Ares.

«Estamos emocionadísimos porque vuelva el Santísimo otra vez a nuestras calles», afirma Teresa Muiños, presidenta de la asociación Alfombras Florales de Ares, en La Coruña. Desde finales del siglo XVII, las calles y plazas de esta localidad gallega se visten de flores para servir como alfombras al paso del Santísimo Sacramento con motivo de la fiesta del Corpus Christi. «Yo tengo fotos de mi bisabuela en la alfombra», dice Muiños, ilustrando así el legado histórico que supone para el pueblo esta costumbre de adornar las calles, considerada desde hace 40 años de interés turístico nacional y que atrae a devotos y curiosos de toda Galicia y de toda España.

Con la celebración de este año se retoma esta tradición que tuvo que ser suspendida por la pandemia. «Llevamos todo el año preparándola con mucha ilusión», dice la presidenta de la asociación, que explica cómo desde hace meses bajan a la playa a recoger conchas que luego se usarán para los adornos. También hacen salidas al campo para recolectar semillas de eucalipto y flores silvestres como hortensias y margaritas, y las últimas semanas las han dedicado a cortar la tuya y el pino que servirán de fondo para las alfombras.

El resultado es un kilómetro de alfombra en seis tramos a todo color, con motivos geométricos y religiosos, en el que también hay un espacio para los niños, «de modo que puedan entusiasmarse y continuar la tradición», dice Muiños, una ilusión que comparten con los mayores «para que el Santísimo pase bajo palio por nuestras calles y nos sintamos orgullosos de lo que le hemos preparado».

Lo que sobraba de las serrerías

Desde Ares hasta Tenerife, pasando por grandes ciudades como Madrid o Toledo, o multitud de pueblos de la España vaciada, todavía persiste y con muy buena salud la tradición de alfombrar las calles al paso del Santísimo por el Corpus Christi. La costumbre en Elche de la Sierra, en la provincia de Albacete, data de principios de los años 60, y solo se ha suspendido en los años que ha llovido o los dos últimos, por la pandemia.

Las alfombras de Elche de la Sierra atraen a miles de turistas. Foto: Alfombras de serrín de Elche de la Sierra.

Lo particular de este municipio es que las alfombras las hacen con serrín. «Aquí siempre ha habido muchas serrerías», explica Andrea López, de la Asociación de Amigos de las Alfombras del Corpus. «Al principio, lo que se hacía era pintar las virutas que sobraban con colores primarios».

A los pocos años se empezó a usar directamente el serrín y con más dibujos, de modo que el Corpus Christi se ha convertido «en nuestra fiesta más importante. La gente lo vive mucho, es un sentimiento que es difícil de explicar», cuenta. Este año, la novedad será la inauguración el próximo sábado del Museo de las Alfombras, con la presencia del presidente de Castilla-La Mancha. El museo muestra imágenes de esta fiesta que es, como la de Ares, de interés turístico nacional.

Son meses y meses de una labor que se desluce en tan solo unas horas, «pero es muy bonito ese trabajo tan minucioso y que lleva tanto tiempo», cuenta Andrea López. Para ella, se trata de hacer «la alfombra más bonita por la que pueda pasar la custodia. Y que cuando acabe la procesión podamos decir que lo hemos dado todo».

La Eucaristía unida a la caridad

Con motivo de la solemnidad del Corpus Christi, la Iglesia celebra también el Día de la Caridad, que este año lleva por lema De la adoración al compromiso. En esta jornada la colecta de todas las Misas se destina a los fines de Cáritas, y durante estos días miles de voluntarios salen a la calle con la tradicional hucha de color rojo para recaudar fondos. Por ejemplo, en Madrid son 500 las mesas informativas y más de 5.000 los voluntarios que recordarán a los madrileños la necesidad de arrimar el hombro.

«No podemos celebrar la solemnidad del Corpus Christi sin vivir y experimentar la profunda e inseparable unidad entre la fe y la vida, entre la Eucaristía y la caridad», explican los obispos de la Subcomisión de Acción Caritativa y Social en su mensaje para esta jornada.

Para los prelados, la solidaridad «no puede ser flor de un día», sino que «se necesita un compromiso estable» que tiende a ser «cada vez más necesario», sobre todo «en un contexto de inequidad provocado por los modelos económicos actuales y, concretamente, por el encarecimiento de la energía y la consiguiente inflación».

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