«Nos recordáis que no estamos hechos solo para el trabajo, sino también para la fiesta» - Alfa y Omega

«Nos recordáis que no estamos hechos solo para el trabajo, sino también para la fiesta»

Francisco recibe a un grupo de feriantes y les da las gracias por «sembrar alegría»

Ángeles Conde Mir
El Papa saluda a sor Geneviève durante la audiencia de este lunes. Foto: Vatican Media.

Entre sus compromisos de este lunes, el Papa Francisco ha recibido a un grupo cuanto menos curioso. Eran los miembros de la principal asociación de feriantes italianos. Han llegado al Vaticano de la mano de una vieja conocida del Pontífice, sor Geneviève, a la que llaman «la monja del Luna Park». La religiosa forma parte de la congregación de las Hermanas de Carlos de Foucauld, es de origen francés y vive en Italia desde hace décadas. Conoce a Jorge Mario Bergoglio desde hace años. En 1977, la tía de la religiosa, también misionera, fue secuestrada por la dictadura argentina. Sus restos fueron encontrados en 2005 y desde entonces reposan en la parroquia de la Santa Cruz de la capital argentina. Jorge Mario Bergoglio era entonces el arzobispo de Buenos Aires.

Sor Geneviève vive en una caravana como los feriantes de la localidad de Ostia, en un parque de atracciones que visitó Francisco en 2015. Allí el Papa incluso rezó en la capilla de la caravana donde la religiosa vive con otra de sus hermanas.

«Vuestra vocación es sembrar alegría»

Este lunes sor Geneviève cumplía 80 años y Francisco ha pedido a sus invitados que entonaran todos juntos el cumpleaños feliz. Después, el Papa les ha recordado que la Iglesia siempre acompaña a todos los migrantes e itinerantes, como ha hecho especialmente durante los duros momentos de la pandemia. También les ha dicho que son cooperadores del anuncio del Evangelio porque llevan alegría a la gente con sus atracciones de feria: «Sois sembradores de alegría, ¡no lo olvidéis! Y, a veces, sembráis la alegría cuando el corazón no está alegre o está triste por los problemas, y aun así lo hacéis. Por eso, vuestra vocación es sembrar alegría».

«Sembradores de sonrisas, ¡es bonito!», les ha insistido el Papa quien también los ha animado a estar siempre abiertos al encuentro con Jesús a través de las personas a las que divierten. Ha alabado su labor de portar entretenimiento y diversión frente a las muchas dificultades de la vida cotidiana, sobre todo, entre los más pequeños. «La felicidad de un niño en una noria es una imagen de alegría limpia que se conserva en la memoria de las familias», ha dicho Francisco.

Por último, el Papa ha definido su trabajo como creativo, sencillo y genuino y les ha invitado a continuar con su trabajo «en un mundo donde se respira muchas veces un clima gris y pesado». «Os doy las gracias porque en el fondo nos recordáis que no estamos hechos solo para el trabajo, sino también para la fiesta y Dios está contento cuando festejamos juntos como hermanos con sencillez», ha concluido.