Nathalie Becquart, en la lista Forbes de mujeres con mayor influencia en el mundo - Alfa y Omega

Nathalie Becquart, en la lista Forbes de mujeres con mayor influencia en el mundo

La revista norteamericana especializada en el mundo de las finanzas destaca a la religiosa francesa como «la mujer de mayor rango en el Vaticano»

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Nathalie Becquart durante el último Sínodo de los Obispos
Nathalie Becquart durante el último Sínodo de los Obispos. Foto: CNS.

La revista Forbes, conocida por sus listas anuales de las personas más ricas del mundo, acaba de publicar un nuevo elenco con las mujeres de mayores de 50 años de mayor influencia en el globo, entre ellas Nathalie Becquart, subsecretaria del Sínodo de los Obispos.

La lista 50 Over 50: Europa, Oriente Medio y África 2024 muestra a mujeres que con su labor están contribuyendo al desarrollo de la ciencia, a la protección de los derechos humanos, al mundo de las finanzas y de la moda, e incluso a la religión. Son 50 fundadoras, directoras ejecutivas de empresas e instituciones humanitarias a la vanguardia de Europa, Medio Oriente y África, «todas demostrando que la segunda mitad de la vida es también la más exitosa y gratificante», afirma la revista Forbes.

La publicación especializada en el mundo de los negocios y las finanzas presenta a sus lectores a Becquart, de 54 años, como «una monja católica francesa que fue nombrada subsecretaria del Sínodo de los Obispos por el Papa Francisco en 2021. Como parte del principal órgano asesor del Papa, la hermana Becquart es la mujer de mayor rango en el Vaticano y es la primera mujer en obtener el derecho a votar en una conferencia de tan alto nivel».

La religiosa, nacida en Fontainebleau (Francia) en 1969, ya era consultora de la Secretaría General del Sínodo de los Obispos desde 2019, y tras su nombramiento fue la primera mujer en ocupar este cargo de responsabilidad en la curia romana.

Al poco de ser elegida, afirmaba en entrevista a Alfa y Omega que esperaba que su elección contribuyera «a que en diócesis, parroquias y movimientos se abran nuevas posibilidades para incluir a más y más mujeres en los procesos de discernimiento y en la toma de decisiones».

En este sentido, preguntada por el acceso de las mujeres a ministerios ordenados, manifestaba que lo importante en este campo «es cómo hacer que las mujeres participen en los procesos de decisión y se empoderen», abandonando «una Iglesia clerical» en pos de una «sinodal».