José Javier Cedrón: «Me siento sostenido por la oración»
La Iglesia reza por las vocaciones. José Javier Cedrón encontró la suya tras un Camino de Santiago, una canción y unos Ejercicios espirituales. Hoy, desde el seminario pide oraciones para todas las vocaciones: «Nos viene muy bien»
¡Qué bueno caminar contigo! Cuando José Javier Cedrón leyó el lema conjunto de la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y la Jornada de Vocaciones Nativas, que este año se celebran juntas por primera vez, pensó «qué coincidencia». España cuenta con 1.357 seminaristas mayores y precisamente fue a él a quien eligieron de entre todos ellos, para que diera su testimonio. Lo hizo ayer, durante un desayuno informativo, organizado por las Obras Misionales Pontificias, la Conferencia Episcopal Española y la Confederación Española de Religiosos, como parte de los actos para difundir la jornada de oración vocacional que la Iglesia celebra este domingo 26 de abril. Estaba acompañado en la mesa por el sacerdote indio María Jeeva Arulandu, la misionera comboniana Kimala Nanga y la religiosa en formación Montse Chías, pero sólo él había comenzado su discernimiento vocacional, que un día le llevaría hasta el Seminario, durante un Camino de Santiago. «Durante mi peregrinación a Santiago, descubrí una mirada, que era la de un amigo, pero que se me quedó grabada. Sentí que era el Señor quien me estaba mirando», confiesa José Javier. En aquel momento, se hizo realidad el lema que hoy se difunde con la campaña. «Allí encontré la alegría. Empecé mi camino y lo hice en compañía». A su vuelta, el Señor le puso una segunda pista mientras escuchaba música. Sonaba la canción Lento, de Julieta Venegas: «Sé delicado y espera, dame tiempo para darte todo lo que tengo». El joven sintió que era el Señor el que le decía aquellas palabras. Pero José Javier se rindió a la evidencia tras unos Ejercicios espirituales. «Allí le dije que Sí al Señor», reconoce. Unos meses después, comenzaba el curso introductorio del Seminario Conciliar de Madrid, «algo que me vino muy bien porque me ayudó a ver con normalidad el Seminario. Yo nunca había pensado en ser sacerdote y entrar me daba respeto. Era algo que no conocía».
Geografía de la oración
Donde hoy vive José Javier, en el Seminario de Madrid, la Jornada de oración comenzará el viernes, a las 20:30 h., con el musical Saulo, del grupo Damedebeber. Al terminar, dará comienzo una Vigilia por las vocaciones que presidirá el arzobispo, monseñor Carlos Osoro. Después, empezará la oración ante el Santísimo por parte de los distintos grupos parroquiales, movimientos e instituciones de vida consagrada, que ininterrumpidamente estarán orando por las vocaciones en la capilla hasta el día de la Jornada. El domingo, a las 12 h., concluirán los actos con la Santa Misa, que presidirá el arzobispo en la catedral de la Almudena.
Los Seminarios de toda España son, estos días, un hervidero de iniciativas, todas ellas encaminadas a difundir la oración por las vocaciones. En la diócesis de Valencia, por ejemplo, los actos previstos comenzaron ya el domingo 19 de abril, con el festival de la canción vocacional, que reunió a 29 grupos musicales en el Seminario Mayor, y durante el cual los jóvenes de la diócesis podían visitar las instalaciones del Seminario, «para que así los jóvenes de la diócesis puedan conocer el lugar donde se forman aquellos llamados por Cristo al sacerdocio», explicaba a la agencia AVAN Pablo Valls, director del Centro de Oración Vocacional (COV) Juan Pablo II. Tras el festival, se presentó la cadena de oración por las vocaciones, organizada por el COV, y a la que se han apuntado cientos de valencianos para rezar por las vocaciones «en cualquier espacio o lugar», según Valls, durante toda esta semana.
También desde las Órdenes religiosas, y más en este Año de la Vida Consagrada, se suman al empeño de difundir la necesidad de rezar por los que le han dicho, y le dirán, Sí al Señor. Ejemplo de ello es el ingente material preparado por las Hijas de la Caridad y Misioneros Paúles de España, que han organizado una semana vocacional «para ofrecer nuestra experiencia de búsqueda y encuentro». Bajo el lema Todo comienza con un encuentro, «los materiales preparados los hacemos atemporales, para que puedan ser utilizados en cualquier momento. Siempre es el momento de rezar por las vocaciones. De hecho, nosotras los utilizamos más en torno a la fiesta de nuestra fundadora. Otras personas lo utilizarán ahora en el marco de la Jornada de oración por las vocaciones», explica sor Isabel Bugés, miembro del equipo interprovincial de pastoral vocacional de las Hijas de la Caridad.
Incluso la invitación a la oración y al discernimiento vocacional sobrepasa lo material y se convierte en digital. Hoy, son muchos los jóvenes cuya historia vocacional comienza en Internet, o que recurren al continente digital para encontrar el lugar al que Dios les ha llamado. Páginas como Buscoalgomas.com, o vocacion.org, son utilizadas hoy por los jóvenes para encontrar su camino. «Se puede decir de mil maneras, lo importante es rezar para que el Señor mande obreros a su mies y sostenga a los que ya están. La oración nos viene muy bien. Yo me siento totalmente sostenido por ella», asegura José Javier Cedrón.
«La contemplación lleva al compromiso solidario»
El éxodo, experiencia fundamental de la vocación, es el tema del Mensaje del Papa para la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, fechado el Domingo de Ramos, Jornada Mundial de la Juventud. Francisco resalta que «la Iglesia es verdaderamente fiel a su Maestro en la medida en que es una Iglesia en salida, no preocupada por ella misma, por sus estructuras y sus conquistas, sino más bien capaz de ir, de ponerse en movimiento, de encontrar a los hijos de Dios en su situación real y de compadecer sus heridas».
La «dinámica del éxodo» que centra el Mensaje «no se refiere sólo a la llamada personal, sino a la acción misionera y evangelizadora de toda la Iglesia», aclara el Papa. «Escuchar y acoger la llamada del Señor no es una cuestión privada o intimista, que pueda confundirse con la emoción del momento; es un compromiso concreto, real y total, que afecta a toda nuestra existencia y la pone al servicio de la construcción del reino de Dios en la tierra». «Por eso, la vocación cristiana, radicada en la contemplación del corazón del Padre, lleva al mismo tiempo al compromiso solidario en favor de la liberación de los hermanos, sobre todo de los más pobres»
El Mensaje del Papa se dirige de forma especial a los jóvenes, a quienes, «a veces, las incógnitas y las preocupaciones por el futuro y las incertidumbres que afectan a la vida de cada día amenazan con paralizar su entusiasmo, de frenar sus sueños, hasta el punto de pensar que no vale la pena comprometerse y que el Dios de la fe cristiana limita su libertad. En cambio, queridos jóvenes, no tengáis miedo a salir de vosotros mismos y a poneros en camino –les anima Francisco–. El Evangelio es la Palabra que libera, transforma y hace más bella nuestra vida. Qué hermoso es dejarse sorprender por la llamada de Dios, acoger su Palabra, encauzar los pasos de vuestra vida tras las huellas de Jesús, en la adoración al misterio divino y en la entrega generosa a los otros. Vuestra vida será más rica y más alegre cada día».