Más de 100 sacerdotes y religiosas asesinados, secuestrados o detenidos en 2022

Más de 100 sacerdotes y religiosas han sido asesinados, secuestrados o detenidos en 2022

Los secuestros y asesinatos en Nigeria y la persecución política en Nicaragua son dos de los rostros de la persecución religiosa en el año que termina, según ACN

María Martínez López
Secuestros en Nigeria
28 sacerdotes han sido secuestrados en Nigeria. Foto: ACN.

17 sacerdotes y religiosas asesinados, 49 secuestrados y 32 detenidos. Es el balance trágico —y parcial— que la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada hace de 2022. Nigeria es uno de los principales focos de preocupación. Allí, distintos grupos han secuestrado a 28 sacerdotes y siete religiosas. Tres de los clérigos fueron asesinados, a los que hay que sumar otro más sin secuestro previo.

Dos permanecen en paradero desconocido, junto con otro desaparecido desde 2019. El resto, junto con las religiosas, quedaron en libertad. La semana anterior a Navidad fueron raptados tres sacerdotes, pero el peor mes fue julio, con siete secuestros.

Otros ejemplos de sacerdotes muertos en el ejercicio de su labor pastoral incluyen tres sacerdotes brutalmente asesinados en México por miembros de cárteles de la droga, y dos sacerdotes tiroteados en el este de la República Democrática del Congo. En este mismo país fue asesinada en octubre la religiosa Marie-Sylvie Vakatsuraki. Es una de las cinco religiosas asesinadas en 2022, junto con Maria de Coppi (Mozambique); Mary Daniel Abut y Regina Roba (Sudán del Sur) y Luisa dell’Orto, en Haití.

Haití, Camerún y el Sahel

En este mismo país, que se ha convertido en uno de los más violentos de Centroamérica, cinco sacerdotes fueron secuestrados por bandas criminales, aunque todos fueron liberados posteriormente. En Camerún, en el marco del conflicto independentista en la zona anglófona, en septiembre fueron secuestrados cinco sacerdotes y una religiosa, liberados cinco semanas después. Otro clérigo fue secuestrado por separado.

Dentro de la región del Sahel, sigue desaparecido desde 2019 el padre Joel Yougbaré de Burkina Faso. Una religiosa fue secuestrada este año en el mismo país y posteriormente liberada. En Malí fue secuestrado un sacerdote, que sigue retenido. En Etiopía y Filipinas también fueron secuestrados y luego puestos en libertad sendos presbíteros.

Nicaragua

Por último, al menos 32 clérigos fueron detenidos en el curso de 2022 con intimidación y coacción. De ellos, once casos ocurrieron en Nicaragua como consecuencia del enfrentamiento del Gobierno con la Iglesia. Entre ellos hay al menos dos seminaristas, un diácono, siete sacerdotes y el obispo Rolando Álvarez, en arresto domiciliario. El 10 de enero deberá comparecer ante el tribunal, acusado de «atentar contra la integridad nacional». También hay informes de sacerdotes a los que se ha prohibido abandonar sus parroquias, y de al menos diez clérigos a los que el gobierno impide regresar al país.

Los casos de detenciones con coacción más recientes afectan a cuatro sacerdotes de la Iglesia grecocatólica ucraniana que trabajaban en la Ucrania ocupada por Rusia. Dos fueron puestos en libertad y deportados a territorio ucraniano. Los otros dos —Ivan Levytskyi y Bohdan Heleta— permanecen detenidos y podrían ser acusados de terrorismo. Existe el temor de que sean torturados en prisión.

China

La fundación pontifica recuerda que a estos datos habría que añadir el de sacerdotes y obispos católicos detenidos en China en 2022, que resulta «casi posible de averiguar». Según la información recogida por ACN, los clérigos de la Iglesia clandestina son repetidamente detenidos por las autoridades por un periodo de tiempo para presionarlos para que se unan a la Iglesia aprobada por el Estado. Por ejemplo, entre enero y mayo de 2022, desaparecieron al menos diez sacerdotes, todos ellos pertenecientes a la comunidad clandestina de Baoding (Hebei).

ACN llama a todos los países implicados a hacer lo posible para garantizar la seguridad y libertad de los sacerdotes, religiosas y demás agentes de la pastoral, que sirven indiscriminadamente a los más necesitados en situaciones de peligro. La fundación internacional también pide oraciones por los que permanecen en cautiverio, así como por las comunidades y familias que lloran a los asesinados.

Liberados en Eritrea

Uno de los casos de detención irregular de clérigos que denuncia Ayuda a la Iglesia Necesitada acaba de resolverse: el obispo eritreo Fikremariam Hagos y el sacerdote Mihreteab Stefanos han sido puestos en libertad por las autoridades de Eritrea tras ser detenidos en octubre. Según informa Avvenire, la noticia se filtró en la tarde del miércoles la noticia, y poco después se difundió un vídeo que los muestra llegando a la catedral de Asmara junto con el obispo, mientras reciben saludos de sacerdotes y religiosas. Parece que la intervención de la Secretaría de Estado vaticana fue decisiva.

Hagos, obispo católico de Segheneiti, había sido detenido y llevado por agentes de la dictadura en el aeropuerto de Asmara a su regreso de un viaje a Europa sin motivo alguno. Días antes, había pedido a los eritreos que no compraran objetos saqueados por los soldados que combatían en el conflicto de Tigray (Etiopía). El padre Stefanos, por otro lado, fue detenido en la catedral de Segheneiti, también sin que se revelaran las acusaciones. Un fraile capuchino en Tessenei, el padre Abraham, había sido arrestado con ellos.