Manipulación del Caso Savita

El caso de Savita Halappanavar se utilizó como pretexto para la aprobación, en julio, por primera vez en Irlanda, de una ley que permite el aborto en caso de riesgo para la madre, pero un nuevo estudio ha confirmado que la muerte de esta mujer, en noviembre de 2012, nada tuvo que ver con el rechazo del Hospital Galway a practicarle un aborto. El informe final, elaborado por la Health Information and Quality Authority (Autoridad sobre Información y Calidad Sanitaria), un organismo independiente, atribuye la muerte de esta mujer al «fallo en la administración de los elementos más básicos de cuidado del paciente», así como al «fallo a la hora de reconocer y actuar» sobre los signos de que sufría una septicemia –infección de la sangre– resistente a los antibióticos. Tras su ingreso por un principio de aborto espontáneo, no se cumplieron los protocolos sobre detección y tratamiento de la sepsis, que podrían haber salvado su vida. Este informe confirma las conclusiones de dos investigaciones previas.