Los miércoles no existen, una original y muy creíble dramedia romántica

¿Una comedia romántica? No. Si te decides a ver esta obra vas a ver una dramedia romántica. Sí, así es como ellos mismos la definen. Un nuevo término que recoge muy bien los sentimientos que la obra refleja, y que no son otros que los de la vida cotidiana de la mayoría de gente entre 30 y 40 años… Y, al fin y al cabo, sentimientos universales sobre la vida, el amor, la pareja, la amistad, la familia, el futuro.

El elenco de seis personajes de Los miércoles no existen se gana todas y cada una de las palmadas del aplauso final. Recuerdan, por su forma de actuar, su soltura, su complicidad en el escenario y sus tablas, a las grandes películas corales españolas de los últimos años: Días de fútbol, El otro lado de la cama… Todos y cada uno de los personajes que interpretan sobre el escenario del Teatro Fígaro resultan muy creíbles, tanto que te olvidas de la falta de los elementos físicos del escenario que intentan recrear, y tu mente se mete tanto en la historia que te los imaginas ahí, perfectamente reales, cuando, en realidad, no existen.

Una originalísima puesta en escena, con una pizarra como telón de fondo, ayuda al espectador a no perderse entre las idas y venidas de una historia que engloba un periodo temporal de 5 años, entre 2010 y 2015, y las decisiones vitales que en esos 5 años van marcando el destino de los personajes… a veces queriendo, a veces sin quererlo, un miércoles cualquiera, o los miércoles que no existen.

No podía faltar una mención a los valores de esta obra. Valores, que, como los sentimientos que intenta mostrar, son también universales. Valores que muestran lo mejor y lo peor de nosotros mismos, puesto que todos nos podemos sentir reflejados en ella: inmadurez, soledad, cobardía, engaño… pero también amistad, solidaridad, amor, compañerismo y valentía. Todos ellos ocultos tras ciertos complejos, u ocultando ciertos miedos. Pero, con todos ellos, nos damos cuenta de la moraleja que la obra nos quiere transmitir: que en la vida no hay decisiones intrascendentes; que todos nuestros actos, movidos por sentimientos o valores buenos o malos, van a tener consecuencias… y no solo en nuestras propias vidas, sino en la de los seres que nos rodean.

Los miércoles no existen

★★★★☆

Teatro:

Teatro Fígaro

Dirección:

Calle Doctor Cortezo, 5

Metro:

Tirso de Molina

QUINTA TEMPORADA.

Desde el 12 de septiembre