«Los temblores se siguen notando», aseguran los salesianos desde Goma - Alfa y Omega

«Los temblores se siguen notando», aseguran los salesianos desde Goma

Los misioneros han enviado una petición de ayuda urgente tras la erupción del volcán Nyiragongo y la amenaza de una réplica. «No hay agua ni electricidad y escasean los alimentos»

Redacción
Foto: Reuters / Djaffar Al Katanty

«No hay agua ni electricidad en la ciudad y los alimentos escasean», explican los misioneros salesianos que trabajan en Goma, República Democrática del Congo (RDC). La erupción del pasado sábado del volcán Nyiragongo ha sumido a la ciudad en el caos. «Los temblores se siguen notando y los niños están muy asustados, al igual que el resto de la población», añaden.

En la erupción han fallecido al menos 32 personas, más de 3.000 cruzaron la frontera con Ruanda y más de 5.000 se han quedado sin hogar, aseguran desde Misiones Salesianas. «Hay menores que se han perdido, y casas e infraestructuras hechas cenizas. No hay agua ni electricidad, y escasean los alimentos», cuentan los misioneros, a la vez que lanzan un mensaje de auxilio. «Necesitamos ayuda de manera urgente para superar esta catástrofe» en una región ya de por sí empobrecida. En la región de Kivu del Norte más de 3,2 millones de personas sufren una grave inseguridad alimentaria, además de «dos pandemias, el ébola y el coronavirus», explica Eusebio Muñoz, director de Misiones Salesianas.

La erupción de Nyiragongo ha sido un golpe también para los misioneros salesianos, que han tenido que ser evacuados junto a los niños que atienden. «Fue un milagro que la lava se parase a escasos metros de nuestro centro». En la misión viven más de 250 menores, desde bebés a adolescentes.

En estos momentos, las autoridades congoleñas han alertado a la población de que podría producirse una segunda erupción volcánica en cualquier momento, ya que los científicos siguen detectando movimientos sísmicos y la presencia de magma en áreas cercanas a la ciudad. «Teniendo en cuenta estas observaciones, no se puede descartar por el momento una erupción en tierra o bajo el lago, y podría producirse con muy poco o ningún aviso», ha asegurado Constant Ndima Kongba, gobernador militar de la provincia. Además, en el peor de los casos, una erupción volcánica bajo el lago, acompañada de un gran terremoto, podría desencadenar una repentina liberación de dióxido de carbono del fondo del lago. Una explosión de este tipo podría asfixiar a miles de personas, han asegurado los expertos.

Bajo esta amenaza, miles de congoleños han salido de la ciudad, algunos a pie y otros en coche. Las autoridades de Kivu del Sur, provincia vecina, han indicado que tienen toda la disposición para ayudar a las víctimas de esta catástrofe y se han creado lugares de recepción y familias de acogida.