Los religiosos españoles concluyen su asamblea general: «Algo en CONFER está fluyendo»

«Algo en CONFER está fluyendo. Hay inquietud, circularidad, sinodalidad, sororidad, fraternidad. Algo está emergiendo», dijo este jueves Jesús Díaz Sariego, presidente de la CONFER, en la clausura de la XXVIII Asamblea General de los religiosos españoles que se ha celebrado esta semana.

«¿Qué nos quiere decir el Espíritu ante la falta de vocaciones? O, si se prefiere, ¿qué Palabra de Dios hay detrás de ello? Porque en la escasez de vocaciones hay claramente un mensaje que aún no hemos logrado descifrar del todo. ¿Qué oportunidades nos brinda el momento?», se preguntó también.

Para Díaz Sariego, la «primera conclusión de esta asamblea» es que «si no hay una conversión sinodal en nuestras personas, no habrá tampoco una sinodalidad en nuestro hacer. El mensaje es claro: en el trabajo diario de CONFER, en nuestro quehacer cotidiano, hemos de mostrar que nuestro ser es, ante todo, sinodal».

En opinión del presidente de los religiosos españoles, «la experiencia de comunión nos ayuda a situarnos en la sociedad en la que estamos y en la Iglesia de la que formamos parte. Una sociedad y una iglesia que, por su propia esencia, son plurales. Esta disponibilidad en la aceptación activa de la pluralidad nos hace más maduros».

En este sentido, lo importante a la hora de llevar a cabo esta tarea «son los procesos», aseguró, porque «los planes y las líneas estratégicas solo cumplirán su objetivo si nos abren procesos, que son tan importantes o más que los resultados».

«No nos obsesionemos con los resultados –pidió el presidente de CONFER–, sino vivamos más bien los procesos». Del mismo modo, «no nos podemos dejar abrumar para no perdernos en proyectos y papeles que al final nos van a cansar», recordó.

En cualquier caso, de la Asamblea salió la decisión de «una mayor implicación y colaboración de las congregaciones religiosas en proyectos comunes», porque «esto anima y estimula», dijo Díaz Sariego. Ejemplo de ello son «los fondos de ayuda para la vida religiosa y el nuevo fondo de solidaridad que hemos creado».

Entre otros desafíos, CONFER incidirá en «mejorar la comunicación hacia el exterior», para «visibilizarnos mejor como voz e imagen de la vida consagrada en nuestros días». Junto a ello, mostrará su «apertura a colaborar con otras instituciones de la Iglesia y de la sociedad en general», en un discernimiento de alianzas «que es una tarea necesaria e importante en estos momentos para nosotros».

En paralelo, el presidente de CONFER mostró su compromiso de «seguir avanzando, de forma coordinada, en el mutuo acompañamiento sobre el impacto que ha producido en nosotros la realidad de los abusos a menores y personas vulnerables». En este ámbito, alertó sobre «nuevos desafíos» como «los abusos de poder y de conciencia que, en algunos casos, derivan en abuso sexual a personas adultas, especialmente religiosas».