Los obispos del Caribe denuncian las maniobras militares de Estados Unidos en la zona - Alfa y Omega

Los obispos del Caribe denuncian las maniobras militares de Estados Unidos en la zona

«La guerra nunca será una solución adecuada» frente al desafío del narcotráfico, afirman en un comunicado sobre la crisis en la región

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Buque de guerra norteamericano en acción. Foto: Pxhere.
Buque de guerra norteamericano en acción. Foto: Pxhere.

Los obispos de las Antillas ha expresado en un comunicado su preocupación ante el aumento de tropas estadounidenses en el Caribe, bajo el argumento de combatir el narcotráfico. En el texto advierten de que estas maniobras militares podrían acarrear «posibles implicaciones» para «el bienestar socioeconómico, político y humanitario de nuestra región y su gente».

«El diálogo y la cooperación son urgentemente necesarios para aliviar las crecientes tensiones geopolíticas y fomentar una paz duradera», afirman asimismo. Se da la circunstancia de que, hace tan solo unos días, el presidente venezolano´, Nicolás Maduro, solicitó por carta al Papa León XIV que «ayude a Venezuela a preservar la paz y la estabilidad» ante la «amenaza» de Estados Unidos.

Los obispos de las Antillas en una de sus últimas reuniones. Foto: CELAM.

Los obispos reconocen que «nos encontramos en una encrucijada» debido al desafío del narcotráfico, «que continúa devastando las sociedades caribeñas, erosionando vidas, futuros y el tejido moral mismo de nuestras comunidades».

Respeto a la ley

Sin embargo, el uso de la fuerza desproporcionada «no puede justificarse como medio de resolución», ya que «tales actos violan tanto la sacralidad de la vida humana como la soberanía de las naciones independientes». En este sentido, los objetivos de asegurar las fronteras y eliminar el narcotráfico «deben perseguirse con respeto a la ley y a la dignidad de la vida humana».

Soldados venezolanos desplegados en el litoral de su país. Foto: CNS.

El enfrentamiento armado «nunca será una solución adecuada», asegura el texto. Por ello, «la presencia de buques de guerra en nuestras aguas caribeñas representa amenazas reales e inmediatas para la estabilidad regional y el bienestar de nuestras naciones».

De ahí que concluyen haciendo un llamamiento «a quienes han recibido el liderazgo» político para disminuir el alcance del conflicto. Y recuerdan «las enseñanzas de las Escrituras» en este sentido: «Se nos manda amarnos unos a otros, incluso a nuestros enemigos. El mundo puede estar en guerra, pero estamos llamados a orar por la paz y a actuar en paz».