Los obispos de EE. UU. critican la propuesta de ley que pretende retomar el muro con México
El próximo jueves se vota una proposición de los republicanos, que controlan el Congreso. Limitaría las ayudas públicas a organizaciones religiosas que ayuden a los inmigrantes
Los obispos de Estados Unidos han criticado duramente la ley migratoria que, a propuesta del Partido Republicano, se votará el próximo jueves en el Congreso del país. La propuesta HR2, para una Ley para Asegurar la Frontera, no solo busca según EFE reanudar la construcción del muro con México, sino también restringir la ayuda gubernamental a organizaciones que ayuden a migrantes, entre otras medidas.
Mark J. Seitz, presidente del Comité sobre Migración de la Conferencia Episcopal Estadounidense, ha enviado una carta exhortando a los miembros del Congreso a oponerse a la proposición de ley. En su lugar, les pide «apoyar la elaboración de una legislación bipartidista que esté más en línea con la rica tradición de acogida de nuestra nación».
En la misiva, Seitz reconoce que los obispos apoyan varias de las medidas que incluye la ley. Sin embargo, subraya sobre todo su preocupación por cómo el proyecto de ley «pondría en peligro a los niños no acompañados e infligiría daños a otras personas vulnerables».
Además, «diezmaría el acceso al asilo, obligaría a prácticas dañinas de detención» y expulsión, «restringiría el acceso al empleo legal, limitaría —y potencialmente eliminaría— las colaboraciones federales con organizaciones religiosas y otras ONG y minaría el Estado de derecho», entre otras consecuencias. Por todo ello, «la aprobación» de la ley «en su totalidad está más allá de toda justificación».
«Buenas intenciones»
«No cuestionamos las buenas intenciones de los legisladores que buscan implementar una legislación que aseguraría las fronteras de nuestra nación. De hecho, nos sumamos a la llamada a poner en marcha una gestión de la frontera eficaz y humana como parte de un marco de reformas migratorias integrales», matiza Seitz. Reconoce asimismo que los obispos «no desprecian los desafíos en la frontera con México, ni el derecho de las naciones a mantener sus fronteras».
«Sin embargo», añade citando a Juan Pablo II, «nuestra fe también nos impulsa a ser «defensores vigilantes, defendiendo contra cualquier restricción injusta al derecho natural de las personas individuales a moverse libremente dentro de su propia nación y de una nación a otra»». También en palabras del Papa polaco, esto les mueve a llamar la atención sobre «los derechos de los migrantes y de sus familias y sobre el respeto a su dignidad humana, incluso en los casos de inmigración no legal».
La propuesta HR2 se votará el mismo día en que deja de aplicarse el Título 42, una medida de la época de la pandemia que permitía expulsar por razones sanitarias a los solicitantes de asilo. En su lugar, la Administración Biden ha presentado una batería de medidas para promover las vías legales: ampliar el programa de reunificación familiar, duplicar el número de reubicaciones de refugiados desde América Latina y establecer centros regionales para que los migrantes puedan solicitar asilo sin tener que llegar a la frontera del país. Sin embargo, al mismo tiempo se anunciaron medidas más duras para quienes crucen la frontera de forma irregular, y el envío de 1.500 soldados a la frontera.
Veto de Biden
Aunque el Partido Republicano tiene mayoría en el Congreso y por tanto es probable que la propuesta HR2 salga adelante, el presidente Joe Biden se ha comprometido a vetarla en caso de que así sea. Así lo advirtió este lunes la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, en su rueda de prensa diaria. Describió la propuesta como un «desastre» para la seguridad fronteriza y un «regalo de Navidad» para los traficantes de personas.
«Llevaría a más migración ilegal al bloquear vías legales de protección, pisotearía los valores centrales de nuestra nación y las obligaciones internacionales en una bendición para los dictadores en el mundo», auguró. Jean-Pierre agregó que, en vez de destinar más recursos para tecnología de seguridad en la frontera y para los funcionarios y jueces migratorios, supondría un «malgasto» de dinero en un «muro ineficaz».
Por otro lado, la portavoz del Gobierno estadounidense criticó el anuncio hecho el mismo día por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, de desplegar una nueva unidad de la Guardia Nacional que operará con helicópteros para evitar la entrada de migrantes desde México. Abbott también prepara leyes para considerar un «delito grave» la entrada ilegal y permitir la expulsión de los migrantes.