Los obispos de Chad instan al desarrollo democrático de las próximas elecciones - Alfa y Omega

Los obispos de Chad instan al desarrollo democrático de las próximas elecciones

Entre los candidatos a la presidencia, el favorito es precisamente Déby Itno, apodado Kaka, hijo del difunto presidente y actual jefe de Estado interino de facto de Chad

Victoria Isabel Cardiel C.
El jefe de la junta militar y presidente de transición de Chad, Mahamat Idriss Déby
El jefe de la junta militar y presidente de transición de Chad, Mahamat Idriss Déby. Foto: Reuters / Israel Matene.

Han pasado más de tres años del golpe de Estado de 2021, que acabó con la muerte del todopoderoso presidente de Chad que había gobernado el país con puño de hierro durante dos décadas, el mariscal Idriss Déby, y que encumbró como nuevo jefe de Estado a su hijo, el general Mahamat Idriss Déby. Su llegada forzada al poder se gestó con el respaldo de la comunidad internacional en aras de la estabilidad de la región.

El país de África central vuelve a las urnas en mayo, en un clima rebosante de fuertes tensiones políticas y comunitarias, para elegir a su próximo presidente lo que debería atajar formalmente la transición dirigida por la junta militar.

La primera vuelta tendrá lugar el 6 de mayo, a la que seguirá una segunda el 22 de junio en caso de que ningún candidato alcance la mayoría absoluta. Sin embargo, no se esperan muchos cambios. Entre los candidatos a la presidencia, el favorito es precisamente Déby Itno, apodado Kaka, hijo del difunto presidente y actual jefe de Estado interino de facto de Chad.

A pesar de que al principio de su mandato había prometido no acudir a las urnas, el partido fundado por su padre, el Mouvement patriotique du salut (MPS), le designó candidato. Esta elección también ha sido posible gracias a la aprobación en referéndum de la nueva Constitución del país el pasado mes de diciembre. La Carta Magna ha sido fuertemente contestada por la oposición, que incluso llamó al boicot de la votación y denunció después la falsificación de los resultados. De hecho, la entrada en vigor del nuevo texto constitucional fue calificada de «segundo golpe de Estado» ejecutado por Déby.

Al descontento de la oposición se añade la preocupación por la credibilidad y la transparencia de las elecciones presidenciales, a la luz de las modificaciones introducidas por el Consejo Nacional de Transición (CNT) en el código electoral. Entre los cambios que se cuestionan, figura por ejemplo, la composición favorable al régimen de Déby de la Agencia Nacional de Gestión Electoral; la restricción de las candidaturas independientes y el hecho de que ya no sea obligatorio exponer los resultados del recuento delante de los colegios electorales.

La campaña electoral ha dado su pistoletazo de salida y la Conferencia Episcopal de Chad (CET) ha hecho un llamamiento al gobierno de transición, instando a que se tomen medidas para garantizar el desarrollo democrático de las elecciones presidenciales.

En un comunicado publicado este lunes 15 de abril, los obispos reconocieron la importancia de los comicios para devolver al país un gobierno constitucional.

«Los chadianos conceden una gran esperanza a las elecciones, en la medida en que ven en ellas la posibilidad de salir del periodo de Transición y prevén el establecimiento gradual de instituciones republicanas fuertes y creíbles», afirmaron los obispos de Chad donde conviven un 55 % de musulmanes y más de un 41 % de cristianos, la mayoría católicos.

El episcopado del país de Africa central instó al gobierno de transición a «hacer todo lo posible para garantizar el buen desarrollo y el éxito de los comicios, promoviendo la libre expresión de la opción de cada ciudadano, en el respeto del código electoral y la transparencia de los resultados de los votos depositados en las urnas».

En su declaración, los obispos invitaron a los aliados internacionales de Chad a ejercer su influencia para guiar a todas las partes hacia una conclusión pacífica del periodo de transición y la formación de instituciones dignas de confianza.

Los obispos instaron a los candidatos presidenciales a cumplir seriamente los compromisos recogidos en el código de conducta que han suscrito y a garantizar la adhesión entre sus seguidores.

«Hacemos un llamamiento a todos para que respeten la dignidad de la persona humana. El futuro de Chad está en manos de sus niños. La paz es ante todo un don de Dios que hay que recibir y construir juntos», afirmaron los obispos.