Los 150 confesionarios de la JMJ de Lisboa serán construidos por reclusos
Servirán para «contribuir a la reinserción social» de los internos y simularán «una casa abierta», dicen los organizadores
Los 150 confesionarios que se van a utilizar en el Parque del Perdón, espacio que se habilitará en el barrio lisboeta de Belém durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de este verano en Portugal, serán construidos por reclusos de centros penitenciarios locales, informa la agencia EFE.
En concreto, serán presos de las cárceles de Coimbra, Paços de Ferreira y Oporto, según declaraciones del Comité Organizador Local (COL) divulgadas por el medio luso 7Margens, que precisó que se ha creado un protocolo de colaboración con la Dirección General de Reinserción y Servicios Penitenciarios de Portugal.
«Con esta colaboración pretendemos contribuir a la promoción de la reinserción social de estos reclusos en su reincorporación a la vida activa, a través de su formación profesional, trabajo e interacción con la comunidad», alegó el COL.
Los confesionarios estarán ubicados en el Parque del Perdón, a escasos metros del conocido Monasterio de los Jerónimos del 1 al 4 de agosto, donde se ofrecerá servicio de confesión en diferentes idiomas.
Consistirán en «una estructura simple y de pequeñas dimensiones», con tres paredes y un techo para simular «una casa abierta», según el COL.
20 de los 150 tendrán un reclinatorio con separación, mientras que el resto contará con dos sillas enfrentadas para lograr una experiencia «más personal» y un espacio más accesible, «especialmente para personas con movilidad reducida», alegó el COL.