Las oblatas atendieron a un 34 % más de mujeres en 2023
Los proyectos sociales de estas religiosas prestaron asistencia a 7.970 víctimas de prostitución y trata
La memoria correspondiente a 2023 sobre las iniciativas de las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor en la Provincia Europa (España, Italia y Portugal) muestra que atendieron a un total de 7.930 mujeres. Son un 34 % más de las que asistieron en 2022. De ellas, un 80 % se encontraba en situación de prostitución, un 10 % son posibles víctimas, un 8 % son víctimas de otras violencias o están en situación de exclusión social y un 2 % fueron identificadas como víctimas de trata por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El informe recoge un aumento del 20 % en el número de problemas de salud que las oblatas han identificado entre estas mujeres. Según ha revelado este miércoles durante la presentación del informe Cristina Ramírez, responsable del Grupo de Trata en la Provincia Europa, «las mujeres acompañadas por las oblatas presentan mayor deterioro en su estado de salud, tanto física como mental, en parte consecuencia del aumento de la violencia experimentada en el ejercicio de la prostitución». Otra de las fuentes de los traumas que sufren es «la etapa de captación y tránsito en el caso de las víctimas de trata».
Tal y como ha apuntado Ramírez, muchas de estas mujeres «se niegan a interponer denuncia por miedo a represalias, así como a causa de su situación administrativa». Se refiere al 80 % que se ven obligadas a guardar silencia pese a sufrir abuso sexual, acoso, violencia de género, agresiones o explotación sexual.
Por su parte, la oblata Carmen Ortega ha diagnosticado en la presentación de la memoria que el recorte en las ayudas estatales y autonómicas ha situado a estas mujeres en una situación aún más vulnerable. «Se hace necesario que desde los gobiernos se impulsen medidas y propuestas legislativas globales e inclusivas con apoyo presupuestario que las garantice y mantenga en el tiempo», ha reivindicado la religiosa. Y ha señalado como principios vertebradores de estas normas «que den respuesta real a las necesidades de las mujeres, no las revictimicen, estén orientadas a restituir el daño de las víctimas y les permitan el acceso real a derechos».