Las iglesias piden a la UE que ayude a salir de Afganistán a las personas en peligro

Las iglesias piden a la UE que ayude a salir de Afganistán a las personas en peligro

La prensa local ya ha registrado el asesinato de un cristiano a manos de los talibanes. En el país, viven entre 10.000 y 12.000

Redacción
Afganos recién llegados a Pakistán. Foto: Reuters / Saeed Ali Achakza

Las iglesias europeas han instado a la Unión Europea a actuar con determinación frente a la tragedia que está ocurriendo en Afganistán. Los líderes de la Unión deben demostrar que sus valores «no son una retórica vacía, sino principios que conducen a acciones basadas en la ética, más allá de las meras consideraciones políticas o económicas».

Lo afirman el presidente de la Conferencia de Iglesias Europeas (CEC), Christian Krieger, y el cardenal Jean-Claude Hollerich, presidente de la Comisión de Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), en una declaración conjunta con motivo de las reuniones que distintas instituciones de la UE celebran esta semana.

Ambas entidades cristianas hacen un llamamiento en especial a proteger a las personas que son objeto de opresión y están en peligro: mujeres, niños, actores de la sociedad civil, defensores de los derechos humanos, periodistas, artistas, los cristianos y otras comunidades religiosas y los miembros de minorías étnicas o sexuales.

Piden que la UE se convierta en un promotor «fundamental» en la «creación de corredores humanitarios, reasentamiento y otros pasajes seguros para llevar a los refugiados a lugares a salvo fuera de Afganistán. También animamos a los Estados miembros de la UE a garantizar la residencia a los afganos que ya están en la UE y detener los esfuerzos de deportación a Afganistán», se lee en el comunicado.

10.000 cristianos clandestinos

También los cristianos y activistas de derechos humanos de Pakistán están preocupados por el destino de las minorías religiosas afganas bajo el régimen talibán. Han pedido a la comunidad internacional que las rescate tras la retirada de las tropas occidentales, informa OMP-Pakistán. Misiones Extranjeras de París ofrece el dato de que Afganistán tiene entre 10.000 y 12.000 cristianos, en su mayoría conversos del islam. Durante décadas han practicado su fe de forma clandestina, ya que la conversión se considera un crimen que se castiga con la muerte según la sharia o ley islámica.

Según el misionero pakistaní Irfan James, que visitó el barrio de Shahr-e Naw en Kabul en diciembre pasado, «la mayoría de los cristianos han huido de las grandes ciudades de Afganistán». Desde 2015, James ha estado evangelizando en Jalalabad, una ciudad afgana cerca de la frontera entre los dos países. «Me preocupa no ver más interés por ellos en la comunidad internacional. El nuevo Gobierno es conocido por romper sus promesas. Las minorías religiosas ya no están seguras».

«Los talibanes aún no han hecho ninguna declaración sobre los afganos no musulmanes», explica Sabir Michael, profesor de la Universidad de Karachi. «Occidente parece estar utilizando los derechos humanos como una agenda política», y añade que existe incertidumbre sobre el estatus legal de los no musulmanes en el nuevo Estado: «No estamos seguros del estatus de las minorías religiosas bajo los talibanes. ¿Son ciudadanos iguales o pagan el jizya –impuesto a los no musulmanes–? ¿Qué pasa con los que quedaron físicamente discapacitados por la guerra?», se pregunta.

El comentarista político estadounidense Glenn Beck asegura que el Nazarene Fund –una fundación benéfica que tiene como objetivo proteger a las minorías religiosas–, ha evacuado por vía aérea a 5.100 cristianos y otros refugiados de Afganistán desde que el país cayó en manos de los talibanes. Asegura que varios cristianos afganos se encuentran entre las docenas de personas que murieron en el ataque suicida en el aeropuerto de Kabul la semana pasada. Y la prensa local ha registrado la muerte de un cristiano afgano, colgado de un poste por los talibanes el 7 de agosto.

Un miembro de la comunidad cristiana de Afganistán aseguraba a Alfa y Omega hace unos días que el silencio en torno a los cristianos, de momento, evitaba problemas de seguridad: «Por ahora, cuanto menos se habla de nosotros, mejor». «Estamos todos bien, pero no es apropiado entrar en más detalles», pedía.

Antes de concluir, este cristiano aprovechó el contacto con este semanario para hacer una petición a todos los católicos españoles. «Invite a todos a orar por nosotros».