La ONU proclama el 4 de febrero Día Internacional de la Fraternidad Humana
La resolución, propuesta por ocho estados miembros, elige esta fecha por ser en la que el Papa Francisco y el imán de la Universidad de Al-Azhar firmaron el Documento sobre la fraternidad humana en 2019 en Abu Dabi
La Asamblea General de las Naciones Unidas, en el marco de su 75ª sesión, adoptó el lunes una propuesta de resolución para que el 4 de febrero sea el Día Internacional de la Fraternidad Humana. La propuesta, planteada por Arabia Saudí, Baréin, Burkina Faso, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Guinea Ecuatorial, Marruecos y Venezuela, fue aprobada sin ser sometida a votación.
Según el texto, el día internacional podrá empezar a celebrarse a partir de 2021. Todos los estados miembros, las organizaciones relevantes de la estructura de la ONU, otras organizaciones internacionales y la sociedad civil están invitadas a «observar» esta fecha de la forma que consideren oportuna. También se les pide «promover más la cultura de la paz para ayudar a asegurar» esta «y el desarrollo sostenible», y movilizar los «esfuerzos de la comunidad internacional» a favor de «la tolerancia, la inclusión, la comprensión y la solidaridad».
La fecha elegida, reconocen los autores de la iniciativa, está relacionada con el encuentro entre el Papa Francisco y el gran imán de la Universidad de Al-Azhar, Ahmad al-Tayyeb, el 4 de febrero de 2019. En esta histórica cita, se firmó el Documento sobre la fraternidad humana, que inspira la propuesta. Es el principal ejemplo de «todas las iniciativas internacionales, regionales, nacionales y locales y de los esfuerzos de los líderes religiosos para promover el diálogo interreligioso e intercultural». Y demuestra la «valiosa contribución» de las personas de todas las religiones y creencias y del diálogo entre ellas para una mayor «conciencia y comprensión de los valores comunes compartidos por toda la humanidad».
Preocupación por el aumento del odio
Esta resolución pretende responder, desde una «profunda preocupación», a la proliferación de «actos que defienden el odio religioso y minan el espíritu de tolerancia y respeto a la diversidad». Algo especialmente grave en un momento como el actual, en el que la «crisis sin precedentes» por la COVID-19 «exige una respuesta global basada en la unidad, la solidaridad y una renovada cooperación multilateral».
Frente a esto, subrayan la «importancia de concienciar sobre las diferentes culturas y religiones» y el respeto hacia estas y sus manifestaciones. Para ello, recomiendan organizar actividades para promover el diálogo interreligioso e intercultural a favor de la estabilidad social. «La tolerancia, las tradiciones pluralistas, el respeto mutuo y la diversidad de religiones y creencias promueven la fraternidad», afirma el texto. Al debatirse la propuesta, el representante de Alemania manifestó en nombre de toda la Unión Europea su apoyo al contenido, aunque previno contra la proliferación exagerada de días internacionales.