La mujer por fuerza: Tirso de Molina y el genio femenino - Alfa y Omega

El Conde Federico regresa de una embajada en Hungría a su Nápoles natal, donde le espera su amada Fiorela. Lo que no sabe el pobre Conde es que, desde aquel país, le ha seguido Finea, la hermana de Alberto, hombre notable, que ha alojado a Federico durante su estancia extranjera. Finea se ha enamorado perdidamente, pero en secreto, del Conde. Disfrazada de paje, entra a trabajar a su servicio, y desde tan privilegiado puesto, comienza a desbaratar los planes de boda entre éste y Fiorela. Enredando a unos y a otros con vericuetos y engaños conseguirá lograr su propósito: el casamiento con su amado.

La mujer por fuerza es una de las obras menos conocida de Tirso de Molina. Su publicación data del año 1635, y no fue reeditada hasta el siglo XX. Su mal estado de conservación es la razón por la que tan pocas compañías la hayan representado. El actor y director José Maya rescata este clásico en una divertidísima adaptación de Amaya Curieses.

Se trata de la típica comedia de enredo del Siglo de Oro, que mejoró notablemente Tirso de Molina, profundizando en la psicología de los protagonistas y haciendo un estudio más riguroso de la moral humana. Destacan los personajes femeninos, a los que Tirso (y la misma versión de Maya y Curieses), dotan de enorme fuerza e independencia. Algo insólito para la época. A la belleza poética de las palabras y los versos -muy respetados en esta adaptación-, se le une la potencia dramática de los actores, de gran eficacia y seguridad.

Las comedias de enredo del Siglo de Oro se caracterizan por su falta de unidad de tiempo y lugar, lo que hace de ellas obras muy difíciles de poner en escena. Esta dificultad es salvada por José Maya con genial creatividad. Los actores se mueven por el escenario sin ningún elemento de atrezzo, ni escenográfico; sólo con su expresión corporal y su buen hacer interpretativo.

Para dotar de entidad a las muy variadas y cambiantes escenas, el director cuenta además con la ayuda de un interesante diseño de luces y un músico en directo, Tony Madigan quién, como un personaje más, da un contrapunto divertido a los momentos más intensos de la obra. Maravilloso el vestuario, trabajado con texturas materiales y colores muy sugerentes. Genial los guiños interpretativos modernos, divertidísimo el planteamiento…

Todo ello hace de La mujer por fuerza, un espectáculo al que merece la pena dedicarle una tarde.

La mujer por fuerza

★★★☆☆

Dirección:

Plaza de Colón, 4

Metro:

Goya, Banco de España

ESPECTÁCULO FINALIZADO