La mitad de mujeres asesinadas en el mundo lo fueron por su pareja o un familiar
Cada hora mueren cinco mujeres o niñas en el ámbito de pareja o familiar, sobre todo en África. En España, preocupa que uno de cada cinco jóvenes no considera violencia los golpes, amenazas o insultos
En el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres que se celebra este 25 de noviembre, el ruido mediático y social puede hacer perder de vista la multitud de problemas reales que se esconden detrás de las polémicas. Como que, por ejemplo, se estima que la mitad de las muertes intencionadas de mujeres se producen en el seno de la familia o las relaciones de pareja.
Según un nuevo informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés) y ONU Mujeres, de las 81.000 mujeres y niñas asesinadas intencionadamente en 2021, más de la mitad (el 56 %) lo fueron a manos de sus parejas u otros parientes. Esto supone 45.000 mujeres y niñas. O, lo que es lo mismo, una media de cinco cada hora. En comparación, solo el 11 % de los homicidios de hombres ocurren de esta manera.
Con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, Alboan, Entreculturas, el Servicio Jesuita a Migrantes de España (SJM) y Fundación Ellacuría ha querido poner en el centro los derechos de las mujeres migrantes y refugiadas. Es el objetivo de la iniciativa Mujeres en Marcha, que exige normas y políticas migratorias que consideren las desigualdades sociales estructurales que afectan a las niñas, adolescentes y mujeres en todas las fases: el origen, el tránsito y la acogida en los países de destino.
Es un momento muy oportuno para ello, pues se está negociando el Pacto Europeo de Migración y Asilo. De hecho, el procedimiento de frontera que plantea impide de facto que las mujeres puedan acceder al derecho de asilo. Ante esto, piden que la posición española en las negociaciones consista en proponer ajustes para que las mujeres cuenten con el tiempo y los recursos psicosociales y jurídicos necesarios para ejercer sus derechos. Para ello, necesitamos que los ciudadanos colaboren firmando por una migración más segura para las mujeres.
El estudio revela que el número de homicidios de mujeres se ha mantenido casi sin cambios en la última década. Aunque señala que hay indicios de que se ha empezado a producir cierto aumento en América del Norte y en cierta medida en Europa desde a raíz de la pandemia.
África es el continente con más asesinatos de mujeres en el hogar, con una tasa estimada de 2,5 por cada 100.000 mujeres. La tasa fue de 1,4 en América; 1,2 en Oceanía; 0,8 en Asia y 0,6 en Europa. «Detrás de cada estadística de feminicidio está la historia de una mujer o niña individual a la que se le ha fallado. Estas muertes se pueden prevenir», afirmó Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres al dar a conocer el informe.
Más rechazo entre los mayores
Sin embargo, más allá de las muertes a manos de maridos, novios o exmaridos o exnovios, que en España han sido 38 en lo que va de año —1.171 desde 2003—, la violencia tiene muchos más rostros. Con el problema de que no siempre se perciben como tales, especialmente entre las nuevas generaciones. La voz de alarma en este sentido la ha vuelto a alzar el III Macroestudio de Violencia de Género Tolerancia cero, realizado por la Fundación Mutua Madrileña y Antena 3 Noticias con una encuesta a 6.200 españoles durante el mes de octubre.
Según el mismo, uno de cada cinco jóvenes varones entre 18 y 21 años no cree que golpear a su pareja en una discusión, insultarla, amenazarla o controlar su móvil sean formas de violencia. Entre las personas de ambos sexos de este grupo, un 16,9 % cree que golpear a su pareja no es maltrato (6,7 % en la población general). Un 17,1% piensa lo mismo de los insultos (8,35 % en la población general). Un 15,5% tampoco ve violento amenazar (7,6 % en la población general). Mayor aún es la tolerancia a controlar el móvil, algo que el 21,5 % no considera violencia. En el conjunto de la población, es el 13 %.
Las cifras crecen aún más si se mira solo a los varones. Entre los 18 y los 21 años, el 21,1 % no ve violencia en golpear; el 22,4 % en insultar; el 20,7 % en amenazar, y el 24,4 % en controlar el móvil. Estos datos duplican a los de los jóvenes de entre 22 y 34 años. Otro dato significativo es que mientras para los mayores de 55 años la violencia de género es «inaceptable», entre los jóvenes de 18 a 21 años el porcentaje se reduce al 50 %. Por otro lado, los jóvenes afirman con más frecuencia conocer casos de violencia en su entorno.
La lucha de adoratrices
En este 25 de noviembre, el mensaje de las Adoratrices pretende plantar cara a este silencio social, dando voz a todas las formas de violencia contra la mujer. En un vídeo elaborado desde distintos países, las religiosas ponen el foco en problemas que resultan invisibles en los países más desarrollados o en los que no lo están: desde la violencia doméstica a la trata o la explotación sexual, pasando por la mutilación genital, el matrimonio forzado, las amenazas o la manipulación.
Todas estas prácticas, «al poner en peligro la seguridad, libertad y autonomía de las mujeres y niñas», son manifestaciones de violencia que «vulnera sus derechos e impiden su participación plena en la sociedad y el pleno desarrollo de su potencial como seres humanos», subraya la superiora provincial de Adoratrices Europa-África, Antonia López. «Por ello durante más de un siglo y medio nuestra labor se ha centrado en la lucha por la igualdad».