La Iglesia en Navarra ofrece casas vacías para alquiler social

El vicepresidente y titular de Vivienda del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, y el arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez, han firmado un convenio inédito hasta ahora por el que la Iglesia católica va a ceder varias viviendas en desuso procedentes de su patrimonio con destino al programa público de alquiler social de la comunidad foral.

De esta manera, el parque público de vivienda de alquiler aumentará su oferta aprovechando pisos actualmente vacíos para ofrecerlos en régimen de alquiler social para familias necesitadas. Inicialmente serán 13 las viviendas que se habiliten para su arrendamiento, ubicadas tanto en Pamplona como en otros municipios de alrededor, Tudela o Estella entre otros.

Para Carlos Ayerra, vicario de Economía del Arzobispado de Pamplona, se trata de un acuerdo con las administraciones «muy oportuno en este momento en el que se necesita una especial sensibilidad social. Creo que así cumplimos una labor importante en un ámbito tan necesario como el de la vivienda».

La iniciativa partió del Gobierno de Navarra cuando pidió la colaboración de la diócesis para su programa de alquiler social. «Vimos una serie de viviendas y se preparó un listado con las más adecuadas», confirma Ayerra, quien recuerda asimismo la disponibilidad de la diócesis en este campo en otros momentos, como cuando durante la pandemia ofreció espacios del seminario para las familias más afectadas.

«Para tener las casas vacías, mejor es ofrecerlas para que se beneficien familias que lo necesiten. Y todavía estamos preparando más para futuras convocatorias», señala el vicario de Economía.

Por su parte, el vicepresidente Aierdi ha agradecido la colaboración de la archidiócesis y la ha calificado como «un ejemplo a seguir» por personas particulares que deseen aportar su vivienda en desuso «para hacer efectivo del derecho de acceso a una vivienda digna».

Las 13 viviendas se suman así a los 804 pisos con que cuenta actualmente la bolsa de alquiler del Gobierno navarro, con la que atiende la creciente demanda social en régimen de arrendamiento y a precios asequibles. De hecho, en tan solo cinco años ha pasado de las 475 viviendas adscritas al programa en 2016 hasta las 804 actuales, lo que supone un incremento del 70 % en este período.

El Arzobispado de Pamplona no solo cederá las viviendas, sino que también correrá con los gastos de la reforma necesaria para su acondicionamiento, lo que conllevará unos gastos cercanos a de 114.000 euros.